
Instrumentos de la misión ACES
Ciencia
Europa lanza el reloj más preciso jamás enviado al espacio: «Es un ejemplo de lo que podemos lograr»
El brazo robótico de la Estación Espacial Internacional procederá a instalar ACES el próximo 25 de abril en la plataforma exterior del módulo Columbus de la ESA
El proyecto ACES (Atomic Clock Ensemble in Space), impulsado por la Agencia Espacial Europea (ESA), ha comenzado su andadura hacia la Estación Espacial Internacional (EEI) con el propósito de transformar radicalmente nuestra manera de medir el tiempo. Dotado de dos relojes ultraprecisos y de un sofisticado sistema de transferencia temporal, este conjunto tecnológico establecerá un nuevo referente en la exactitud de la señal horaria transmitida desde el espacio.
Además, permitirá conectar los relojes más avanzados del planeta para someter a pruebas rigurosas principios de la física fundamental, incluida la teoría de la relatividad general formulada por Albert Einstein.
La misión partió este lunes desde el Centro Espacial Kennedy de la NASA, en Florida (Estados Unidos), a bordo de un cohete SpaceX Falcon 9. El despegue formó parte de la trigésimo segunda operación de suministro comercial de SpaceX destinada al abastecimiento de la EEI.
Daniel Neuenschwander, director de Exploración Humana y Robótica de la ESA, destacó la trascendencia del acontecimiento: «Con esta misión, ponemos en órbita el reloj más preciso jamás enviado a bordo de la Estación Espacial Internacional, abriendo nuevas fronteras en la física fundamental, la transferencia de tiempo y la sincronización global. ACES es un ejemplo brillante de lo que Europa puede lograr cuando unimos tecnología de vanguardia, ambición científica y sólidas colaboraciones».
Se trata de una misión de carácter plenamente europeo, bajo la dirección de la ESA y con Airbus como principal contratista. Los dos relojes que integran ACES son PHARAO, desarrollado por la agencia espacial francesa CNES, y el Space Hydrogen Maser (SHM), fabricado por Safran Timing Technologies en Suiza. Estos dispositivos son capaces de generar una señal horaria tan precisa que, según estimaciones, solo perderían un segundo cada 300 millones de años.
El sistema encargado de transferir el tiempo, elaborado por la empresa alemana TimeTech, empleará enlaces tanto por microondas como por láser. Esta tecnología permitirá sincronizar los relojes situados en órbita con los terrestres, con una precisión sustancialmente superior a la de los mecanismos actualmente existentes.
La coordinación de la misión correrá a cargo del centro CADMOS, ubicado en Francia, y del Columbus Control Centre, situado en Alemania. Ambas instalaciones se encargarán de supervisar la operativa diaria de ACES durante los 30 meses previstos de duración del proyecto.
Según el calendario inicial, el brazo robótico de la Estación Espacial Internacional procederá a instalar ACES el próximo 25 de abril en la plataforma exterior del módulo Columbus de la ESA, específicamente en la posición nadir, es decir, orientada hacia la Tierra.
Durante el transcurso de la misión, se realizarán al menos diez sesiones extensas de medición científica. Cada una de estas campañas tendrá una duración de 25 días y se desarrollará mientras la estación completa 16 órbitas diarias alrededor del planeta. Estas observaciones permitirán, entre otros objetivos, verificar los límites de la teoría de Einstein en condiciones de microgravedad y comprobar si se producen desviaciones respecto a las predicciones actuales de la física.
El avance tecnológico que supone ACES no solo contribuirá al estudio de las leyes que rigen el universo, sino que también sentará las bases para una mejora global en la sincronización de redes de telecomunicaciones, navegación y distribución energética, abriendo la puerta a aplicaciones revolucionarias en diversos campos científicos e industriales.