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28 de marzo de 2024

El actor Imanol Arias en 'El Hormiguero'

El actor Imanol Arias en 'El Hormiguero'

'El Hormiguero'

El día en que el cuerpo de Imanol Arias dijo basta

El actor tuvo un pico de estrés que le causó vómitos y pesadillas durante el ensayo de ‘Muerte de un viajante’, que presenta en Madrid

Imanol Arias acababa de terminar sus funciones de El coronel no tiene quien le escriba y empezó a ensayar Muerte de un viajante. Fue un error hilvanar una y otra otra, sin pausa y con prisa. Y lo pagó. Caro. «Peté. Nunca había petado», admitió el actor vasco, que acudió esta noche a El Hormiguero junto a su hijo Jon Arias Vega para promocionar Muerte de un viajante, la obra que presentan en el teatro Infanta Isabel, en Madrid.
«Estaba muy cansado. No me entraba bien el texto. Hubo días que me quedé paralizado. Fui al médico y me dijo que tenía que parar unos días», resumió Imanol.
Su hijo lo vivió así: «En un ensayo se puso malísimo. Estuvo una hora vomitando en el baño. Y yo con él. ‘Que no nos pase esto de fiesta, y que nos pase ensayando’, le decía yo».
¿Qué ocurrió? Pues que le pudo la presión: «Estaba muy cansado, y no lo medí. Esta obra es para entregarte entero. Y no improvisar sobre ella», reflexionó el intérprete.
Su cuerpo le había avisado: «Yo le dije al médico: ‘Como bien, voy al baño, duermo bien, solo que últimamente me despierto cada hora y media’. ‘¿Con qué sueñas?”, me preguntó». El protagonista de Cuéntame respondió con una palabra: «Miedo». Y le describió una pesadilla en la que se quedaba en blanco en el escenario.
El diagnóstico fue claro: «Es un pico de estrés, descanse un poco». «Te estás quedando en nada», le hizo ver el médico. Imanol atendió su consejo.
Volvió sano a los ensayos, a dejarse dirigir por el dramaturgo argentino Rubén Szuchmacher.
Fue Imanol el que propuso al hijo trabajar juntos, el que le anunció que había surgido esta oportunidad. «Le dije ‘uf, papá’. Pero es teatro, es un gran texto, también el director, Rubén Szuchmacher, con el que tenemos una historia de hace muchos años… Se daban los ingredientes para hacer esto sin el morbo y sin el ruido que podría haber alrededor de que currásemos juntos».
«Es la obra más importante de la dramaturgia del siglo XX», resumió Imanol Arias la pieza del norteamericano Arthur Miller. Tan perfecto es el texto que el hijo no permite al padre que se desvíe ni una línea del texto: «Está prohibido improvisar», sentenció Jon.
«¿Cómo es lo de trabajar juntos?», se interesó Motos. «Nos llevamos igual que cuando estamos viendo un partido juntos», contestó el hijo. «Siempre he sido un actor que he tenido un personaje de padre», añadió Imanol.

El padre abofetea al hijo

La función incluye una bofetada del padre al hijo: «El primer día del bofetón –narró Jon– que lo hacíamos con gente, aunque lo habíamos ensayado con gente, no sé que hizo y me dio con una parte de la mano. Pensé: ‘Mañana no voy a poder abrir la boca. Me acaba de reventar’. Y él estaba muy dolido porque hizo Anacleto y se estuvo preparando de especialista, dar mal una hostia en el cine o en el teatro era un fracaso para él».
Imanol se carcajeó. Y después se puso serio para hablar de sus problemas con Hacienda, pendientes aún de ser juzgados.
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