Lewandowski durante un partido con el Bayern de Múnich
Lewandowski repite un 'The Best' que por primera vez no coincide con el Balón de Oro
Desde que en 2016 se empezó a entregar el premio de la FIFA siempre, hasta este año, el ganador había coincidido con el elegido por la revista 'France Football'
Una curiosa y obligada por la pandemia puesta en escena protagonizó la gala The Best. Parece un espacio de teletienda con los dos risueños espectadores a punto de explicar las bondades de un colchón supersónico.
Se da la curiosa circunstancia de que los tres nominados de cada categoría aparecen en directo por streaming, y, en el momento de anunciarse el ganador, los dos no elegidos desaparecen inmediatamente, sin conmiseración, en una suerte de apagón un tanto tragicómico y cruel.
Optaban al galardón de mejor entrenador Pep Guardiola, Roberto Mancini y Thomas Tuchel, que aparecen en las pantallas con pinta de concursantes elegidos al azar.
Arsene Wenger es el encargado de anunciar el ganador. Es raro. Tuchel lleva chándal, Mancini parece que está en bata y de Pep cualquiera diría que se acaba de levantar de una españolísima siestecita en el sofá.
La sonrisa sin dientes de felicidad del entrenador de Sampedor así parece indicarlo, como si aún pudiese recordar el gustoso estirarse entre limonados cojines. Wenger sonríe, anuncia a Tuchel y el técnico alemán sonríe.
Tuchel recibe el premio 'The Best' al mejor entrenador
Mancini y Guardiola se quedan con cara de póquer, unos segundos de expectación y silencio, como de abstracción, de golpe y ambos, de pronto, desaparecen sin compasión. Uno imagina a Roberto diciéndole a su mujer: «Beh, non ho vinto, porca miseria» y a Guardiola diciéndole a la propia, entre bostezos: «Si ho sé no em desperto».
Pero lo mejor es cuando aparece el mejor once de la FIFA en posición táctica, como en los títulos de crédito de The Brady Bunch. Alaba como un pincel con su chaqueta de pata de gallo. Donnarumma también, pero con cuello vuelto. Están Dias, Bonucci (que parece un cantante de ópera en el camerino a punto de salir al escenario de Cavalleria Rusticana) De Bruyne, Cristiano, Jorginho, Kanté, Lewandowski, Messi y Haaland. Furiosas ausencias.
El mejor '11' de la FIFA
Messi juguetea con la cámara en camiseta, o puede que en pijama, y Haaland parece un protagonista de Haneke. Menos mal que aparecen las chicas, las tres mejores para la FIFA: Jenni Hermoso, Sam Kerr y Alexia Putellas. Aparece Infantino que lee la tarjeta con el nombre de Alexia, la primera española en recibir el galardón. Y entonces Sam Kerr y Jenni desaparecen con una contundencia casi horrible.
Alexia Putellas con el Balón de oro el pasado noviembre
Infantino no se marcha. La gala se acaba. Messi sigue jugueteando con la cámara desde algún lugar. Robert lleva traje de gala y es el elegido por segunda vez consecutiva. Lewandowski vuelve a ser el mejor para la FIFA y es la primera vez desde que se entrega el The Best, votado por entrenadores, jugadores y aficionados, que no coincide con el Balón de Oro, que lo deciden los periodistas de France Football.
Una vez sabido quién es el mejor de verdad, de verdad, falta Cristiano, que recibe el premio especial al mejor goleador de selecciones. 115 goles con Portugal que superan las 109 de Ali Daei. «He trabajado muy duro y sigo en ello. Amo este deporte. Todavía siento esa pasión y quiero seguir. Cuando la gente me pregunta cuánto seguiré, digo que espero jugar cuatro o cinco años más. Todo es mental. Físicamente, si tratas bien a tu cuerpo, te va a responder cuando se lo pidas».
Cristiano Ronaldo con el premio 'The Best' al máximo goleador de selecciones
Es cuando se apagan las luces del plató y, como decía Casimiro a los niños antes de irse a la cama (no confundir con Casemiro, que no se sabe, o sí, por qué no estaba), se encienden los sueños.
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