España no encuentra su juego a menos de dos meses del Mundial

España no encuentra su juego a menos de dos meses del MundialAFP

Los cuatro problemas de la selección que Luis Enrique no logra resolver a dos meses para el Mundial

España continúa con las malas sensaciones y sigue sin dar con la tecla antes de Qatar

Siguen sin salir las cosas en la selección española. La derrota ante Suiza ha vuelto a sacar fantasmas recientes, viejas sensaciones de que a la hora de la verdad el equipo no está preparado. En los últimos partidos antes del Mundial los de Luis Enrique continúan sin encontrar el buen juego, sin prácticamente generar ocasiones y, lo que es más preocupante, con una fragilidad defensiva que está generando que cualquier selección ponga en apuros al combinado nacional.
A pesar de que nada esté funcionando como debe, Luis Enrique no parece nervioso y casi no hace autocrítica. Para el asturiano hay que mejorar aunque sigue creyendo que hay muchas cosas positivas y que el equipo tendrá opciones de ganar este martes en Braga para clasificar a la Final Four de la Liga de las Naciones, el torneo que ahora hay en juego. «Hay que trabajar todos los aspectos del juego. Claro que hay que mejorar, trabajar pero tenemos el tiempo que tenemos. Me gusta la fe del equipo», comentó el seleccionador después del traspiés ante Suiza. España está obligada a ganar este martes a Portugal si quiere alcanzar el objetivo de luchar de nuevo por su primera Nations League.
Son varios problemas los que tendrá que hacer frente Luis Enrique para que España llegue en mejor forma a Qatar. El tiempo se acaba, pero como aspecto positivo se puede sacar que la Copa del Mundo son momentos y que ahora mismo todas las grandes selecciones están en un momento de dudas. Solo Brasil y Argentina parecen funcionar por el momento, aunque los test que han tenido han sido ante selecciones de poco nivel como son Ghana y Honduras.
La selección tiene su principal problema en la defensa. Desde hace unos años España está lejos de ser ese muro defensivo que era en el Mundial de Sudáfrica, cuando se proclamó campeona sin encajar ni un solo gol en la fase de eliminatorias. Ahora a España le generan ocasiones con mucha facilidad y bastantes de ellas terminan en gol, algo que no se puede permitir si se pretende llegar lejos en el Mundial. El bajón que ha dado el combinado nacional en este apartado es notable, sobre todo por la calidad de los jugadores, empezando por la portería, donde ya no hay un guardameta de primer nivel y en especial por los defensas centrales, donde España ha pasado de tener una pareja como Piqué y Puyol o Ramos-Piqué a una defensa con jugadores de poca experiencia como Pau Torres o Eric García. Solamente Laporte –ahora lesionado– es un central con bagaje en un gran equipo.
«Creo que la línea más potente que tengo es la defensa», sorprendió Luis Enrique este lunes. El técnico lejos de hacer autocrítica –añadió en esa frase a los periodistas que «a diferencia de lo que pensáis vosotros»– sigue con su plan en la zaga y dice que «defienden todo, desde los puntas hasta los medios».

El mareo del '9'

Otra posición en la que España ya no tiene la misma calidad que antes es en la figura del delantero centro. Antes con David Villa y Fernando Torres esa posición estaba perfectamente cubierta. Sin embargo, ahora no hay un ariete referencia y aunque en un principio parecía que el titular iba a ser Morata, después de esta convocatoria aumentan las dudas sobre quien será el que ocupe ese puesto. En el partido ante Suiza, el delantero madrileño no jugó un solo minuto. «No ha jugado Morata porque así lo he considerado. Nada más», declaró Luis Enrique en la rueda de prensa posterior al partido. En su lugar jugador Asensio como falso '9' y después entró en la segunda parte el debutante Borja Iglesias. Un mareo continuo, con un jugador diferente en cada partido. No se sabe quién es el '9' titular.
España se juega ante Portugal el pase a la 'Final Four'

Asensio celebra el gol conseguido por Jordi AlbaEFE

De todos modos, el problema del '9' es un problema general en toda la selección, pues desde que llegase Luis Enrique al puesto de seleccionador España no ha tenido nunca un once tipo, algo que está confundiendo a muchos jugadores, que a veces no tienen clara cuál es su posición en el campo ni conocen bien a los compañeros que están en ese momento en el campo. No obstante, el vestuario está contento con el asturiano y creen que con él liderando al grupo lograrán llegar muy lejos en el Mundial y para nada se descartan de las selecciones que luchará por hacerse con el campeonato. El equipo cree que estas rotaciones son positivas pues ayuda a mantener a toda la plantilla enchufada.

Predecibles en general

Sin embargo, el principal problema de esta selección es que el resto de equipos saben qué esperar de ella. España ha tenido muchos problemas en su grupo para sacar partidos adelante. No lo consiguió ante Suiza y sufrió una barbaridad ante la República Checa, otro equipo de nivel medio en Europa. Esta tónica fue también la de la pasada Eurocopa en la que a pesar de llegar a semifinales España solo ganó un partido en los 90 minutos ante la débil Eslovaquia y otro en la prórroga ante Croacia. Todos los equipos saben ya jugarle a España, la mayoría como lo hizo Suiza. Desarbolan al combinado nacional y a veces muy fácil. En defensa presionando la salida de balón para después replegar y no dejar espacios y en ataque con mucho balón largo y colgando al área todas las jugadas de balón parado.
A priori, mucho debe mejorar España para ser candidata al Mundial, aunque luego una Copa del Mundo al final es a partido único y lo más importante es ir sacando los encuentros de la manera que sea, poco importa el juego y mucho el resultado. Además, en el fútbol de selecciones todo cambia muy rápido, y si no que se lo digan a Italia que en menos de un año ha pasado de ser campeona de Europa a no clasificarse para el Mundial.
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