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25 de abril de 2024

El ministro de la Seguridad Social, José Luis Escrivá, debería explicar algunas cosas que no están claras.

El ministro de la Seguridad Social, José Luis Escrivá, debería explicar algunas cosas que no están claras.Eduardo Parra - Europa Press

Análisis económico

Alarma: las prestaciones sociales bajan aunque el número de pensionistas aumenta

Lógicamente debería ser al revés, pero resulta que no es así

Me pongo a escribir este artículo muy de mañana, descansado y sin haber bebido más que una cerveza el día anterior, haber comido una riquísima ensalada de pasta y haber cenado frugalmente, como acostumbro últimamente. Lo explico porque, cuando he visto los números de la Seguridad Social, publicados por la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE), lo primero que he pensado es que no estaba viendo correctamente los números y que estaba confundiendo cifras.
Así que me he ido y me he preparado un segundo café y he recordado que ayer no bebí nada de alcohol, salvo la cerveza dicha. He repasado y comprobado que los números que he pasado a mi Excel están bien.
Si los números que he copiado están bien, pueden suceder varias cosas: o nos están dando información errónea a los españoles, incluido al IGAE, desde el organismo que dirige el ministro Escrivá, o han desaparecido pensionistas por muerte súbita, o por covid, o por, como dijo un tonto muy tonto, porque igual se había caído un autobús lleno de gente por un barranco y no nos habíamos enterado, se utilice un nuevo criterio de contabilidad y se han traspasado gastos a otro período u otro organismo, o yo no sé entender los números.
Lo del nuevo criterio contable lo descarto, porque quien fija los criterios de contabilización es la IGAE, y he comprobado que no hay nuevos criterios publicados para la Contabilidad Pública.
Si no se han muerto unos cuantos miles de pensionistas y no ha habido cambios contables, la verdad es que encuentro muy difícil explicar cómo es posible que el gasto de la Seguridad Social acumulado a mayo haya bajado un 2,8 % en prestaciones sociales.
Analicemos los números a ver si encontramos explicaciones:
Los ingresos de la Seguridad Social bajan un 0,1 %.
Las cotizaciones sociales crecen un 5,0 % en los cinco primeros meses del año: en total, 3.334 millones de euros, gracias al empleo y, por lo tanto, hay una muy buena noticia. El ministro aprovecha para mandar un 28,3 % de dinero en transferencias corrientes a la Seguridad Social para evitar que el déficit se dispare. Exactamente, para evitar eso envía desde enero de este año 8.125 millones, cuando el año 2021 mandó 11.679 millones.
Todo esto aparentemente permite, desde el punto de vista de los ingresos, cargar menos las arcas del Ministerio que el año anterior. Debemos recordar que el Ministerio de Escrivá, tiene en presupuesto enviar este año casi 41.000 millones en transferencias corrientes para evitar la quiebra de la Seguridad Social.
Desde el punto de vista de los gastos, estos bajan un 2,9 %, equivalentes a una caída de 2.397 millones de euros.
Los salarios han bajado un 2,1 %, que equivalen a bajar 23 millones de euros. Hay que felicitar a Escrivá porque debe de tener menos empleados públicos, lo cual no es precisamente la tendencia de la Administración del Estado.
Las subvenciones caen un 37,6 %, lo que equivale a una bajada de 889 millones con respecto del año pasado. Hay que felicitar de nuevo a Escrivá, por ir en contra de la tendencia del Gobierno, donde las subvenciones a mayo han llegado a los 6.279 millones con un incremento neto de 370 millones a pesar de la bajada de 889 millones de la Seguridad Social.
Y llegamos al meollo de la cuestión: las prestaciones sociales bajan un 2,8 %. Significa que en todo tipo de pensiones, tanto contributivas como no contributivas, el Ingreso Mínimo Vital y cualquier otra prestación realizada por la Seguridad Social, han bajado en 5 meses 2.147 millones de euros.
Por lo tanto, como ha habido menos gastos, pero también menos transferencias corrientes, el déficit de la Seguridad Social ha pasado de ser de 15.000 millones en el 2021 a 9.108 millones a mayo de 2022.
Dado que estas cifras me descuadraban, he decidido acudir a la web de la Seguridad Social (eSTADISS) y comprobar el número de altas y bajas que hubo en el año 2021. Los resultados fueron 582.647 nuevas incorporaciones al sistema de pensiones nacional y, a su vez, se produjeron 469.762 bajas por diferentes motivos; en definitiva, entraron en el sistema 112.885 nuevos pensionistas.
En lo que va de año, la cifra ha sido de 256.771 nuevos pensionistas, y se han dado de baja 232.451. Implica que a mayo han entrado 24.230 nuevos.
Además, sabemos que los pensionistas que salen del sistema lo hacen a una pensión media mucho más baja que los pensionistas nuevos, que entran con una pensión bastante más alta.
Si sabemos también que las pensiones se revalorizaron de acuerdo con el IPC medio a 30 de noviembre, no soy capaz de entender cómo es posible pagar menos prestaciones sociales en los 5 primeros meses del año que en los 5 primeros meses del año pasado.
Dado que en este Gobierno la mentira es lo más natural, desde el no pactaré con Bildu, o no podría dormir si tuviese que gobernar con Podemos, y los otros cientos de mentiras públicas, y dado que no encuentro explicación, no voy a decir que nos están mintiendo, pero en el fondo mi cabeza dice que aquí está pasando algo, que los datos no cuadran y que yo puedo estar equivocado, pero que, si hay más pensionistas, deberíamos estar pagando más prestaciones sociales.
Pero como la realidad de los números es tozuda, si los números son los que son, yo le pediría al ministro Escrivá que explique a todos los españoles cómo es posible que este Gobierno al que se le llena la boca de ser el más social de la historia de este país, resulta que está pagando menos prestaciones sociales a pesar de que hay más gente en el sistema.
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