La confianza con el empleado se traduce en productividad.
La mayoría de los trabajadores abandona su puesto por no sentirse valorada
Diversas encuestas lo sitúan como el principal motivo para cambiar
Cuando una persona recibe un elogio, el hipotálamo del cerebro produce dopamina, la misma sustancia química que se libera cuando alguien ríe o hace deporte. La dopamina provoca felicidad y satisfacción, y cuando los empleados se hayan en esta situación, producen más. Así lo ha concluido el Centro de Rendimiento Económico en un estudio de seis meses que ha realizado sobre el personal de atención telefónica de British Telecom.
Un estudio de McKinsey concluye que las empresas piensan que el salario, el equilibrio entre la vida personal y laboral y el bienestar son los principales factores para valorar un cambio de trabajo, pero los empleados afirman superan a estas motivaciones el sentirse valorados y tener un sentimiento de pertenencia a la empresa donde están.
Según este informe, el 54 % de los encuestados afirmaba que no sentirse valorado por su organización era uno de los tres principales motivos para dejar su trabajo. Estos sentimientos son especialmente fuertes entre trabajadores de minorías étnicas.
De acuerdo con un estudio de este año de Achievers Workforce Institute, el 79 % de los empleados prefiere estar en un puesto de trabajo en el que se siente valorado aunque suponga ganar menos dinero.
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