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29 de marzo de 2024

Protestas de sanitarios y estudiantes ante la facultad de Ciencias de la Información de Universidad Complutense (UCM), donde la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que cursó allí su carrera de periodismo, recibe este martes un reconocimiento como alumna ilustre, un homenaje que se produce entre medidas de seguridad ante el rechazo que ha despertado que le otorguen este premio

«Fascista, racista, machista y asesina». Estos fueron algunos de los insultos contra Díaz Ayuso que no han merecido ningún tipo de condena para los ministros de SánchezEFE

Protesta en la Universidad

El Gobierno, sin críticas al escrache a Ayuso en la Universidad y con exigencias a la presidenta

Los ministros de Ciencia y Universidades, Diana Morant y Joan Subirats, lejos de condenar el ambiente de intimidación, ponen el foco en la presidenta por sus políticas

El Gobierno se ha echado en brazos de Elisa, la alumna de la Complutense que aprovechó su discurso para criticar a Isabel Díaz Ayuso, en vez de condenar los insultos y amenazas que recibió la presidenta de la Comunidad de Madrid cuando fue a recoger su título de 'alumna ilustre' a la Facultad de Ciencias de la Información.
Nada más lejos de la realidad. Los ministros de Ciencia, Diana Morant, y de Universidades, Joan Subirats, han exigido a la presidenta popular que «dignifique» el nombramiento recibido financiando «adecuadamente» a las instituciones educativas de la región.

Sin condena de lo ocurrido

En vez de condenar el ambiente de intimidación vivido a lo largo de la jornada de este miércoles, los dos ministros pusieron el foco sobre Ayuso, que tuvo que recoger su distinción a la facultad donde ella estudió escuchando insultos y gritos condenables.
Subirats y Morant han aprovechado unas jornadas en la Universidad Carlos III, donde ha reinado un ambiente de total tranquilidad, para afearle a Ayuso sus políticas. Para el ministro de Universidades, la distinción que recibió Ayuso «es un reconocimiento a que sus estudios pudo cursarlos en una universidad pública, aunque no parece que este sea el comportamiento que ella está manteniendo en relación a esa dignificación de las universidades públicas».
La titular de Ciencia ha exigido a la presidenta madrileña, por su parte, que «financie a las universidades» como se merecen, asegurando que Madrid es la comunidad que menos gasta por estudiante universitario en España.
Ambos miembros del Ejecutivo han criticado que las universidades públicas de Madrid «padecen desde hace tiempo infrafinanciación», promoviendo desde la Comunidad, según ellos, «la presencia de las universidades privadas».
En un acto de tolerancia magnánima, Subirats ha 'exculpado' a la Complutense de haber decidido reconocer a Ayuso: «Lo primero es entender que es una decisión de la Universidad tomada en base de su autonomía; no creo que debamos ponerlo en duda en absoluto porque es uno de los valores constitucionales más importantes y eso tiene que seguir así».
Sin embargo, de la boca de ambos representantes gubernamentales no salieron palabras de condena ante los radicales que intentaron boicotear el acto.
En los exteriores tuvo lugar una protesta de un centenar de alumnos que deseaba expresar su rechazo al premio con pancartas y carteles en contra de la presidenta, además de pedir la dimisión del rector de la Complutense, Joaquín Goyache.
«Ayuso, cucaracha, la uni no es de fachas», «Menos policía y más educación» o «Ayuso, dimite, la uni no te admite» fueron algunos de los lemas que corearon los manifestantes.

Ayuso contradice las acusaciones

«Nunca se ha destinado tanto dinero a la universidad pública y a la sanidad como hasta ahora, nunca en la historia de la CAM. Nosotros estamos destinando el 4,5 % aproximadamente; la media en España está en el 1 %. Desde que soy presidenta no hemos hecho otra cosa que incrementar el gasto en becas y en reducción de tasas universitarias», declaró Díaz Ayuso en La Linterna de COPE.

​«Da igual el dinero que inviertas y los recursos que movilices, ellos necesitan azuzar 'lo público' para acosar y provocar preocupación entre los ciudadanos», añadió. «Quienes politizan lo público no ayudan a que la situación mejora, nunca son personas que arrimen el hombro, son unos cuantos que no quieren que nada cambie».
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