Pedro Sánchez haciéndose un selfie
Las apariencias engañan
Sánchez oculta su caída en las encuestas bajo el confeti del Congreso del PSOE
El presidente presume del buen estado de forma de su partido y de su Gobierno aprovechando el primer cónclave socialista en paz en muchos años. Ni los caídos tienen una mala palabra
No es fácil romperle la cintura al presidente del Gobierno. No lo es cuando tiene de su parte la mayoría parlamentaria, el BOE y un potente altavoz mediático. Y aun así Pablo Casado se la rompió el miércoles cuando le ofreció un pacto de Estado que Pedro Sánchez tuvo que aceptar.
Por primera vez en mucho tiempo, esta semana el presidente del Gobierno ha perdido la iniciativa política y ha ido a remolque del líder de la oposición, que es cada vez más líder de la alternativa (así lo dicen los sondeos).
Los socialistas llaman al 40º Congreso del PSOE el de «la unidad», porque por primera vez en muchos años no hay puñaladas a la luz del día y ni siquiera los caídos tienen una mala palabra. Al contrario: la ovación del día fue para una emocionadísima Carmen Calvo, que participó en una mesa sobre feminismo. El presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón, le dijo que nadie deja un cargo con tanta «elegancia» como ella. Y ella respondió: «No sería bien nacida si no agradeciera el cariño de los mías y de las mías».
Carmen Calvo emocionada
Pero para Pedro Sánchez es el Congreso del disimulo, del trampantojo. Con los aplausos de ministros, barones y demás altos cargos socialistas en esta Feria de Valencia trata de acallar la realidad de la calle: que sigue cayendo en las encuestas ante un centro derecha renacido y que su imagen no remonta el vuelo.
Y aun así, el presidente sonríe y los suyos le devuelven la sonrisa. «Todo está ok», resumió en un conversación informal con los periodistas, en la que restó toda importancia al CIS conocido este viernes y a toda encuesta que venga.
Pero claro que le preocupa a Sánchez el socavón electoral. De ahí que haya empezado a repartir cheques a los jóvenes aprovechando el dopaje de los fondos europeos. De ahí que la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, se dedicara este viernes a pasillear preguntando a socialistas andaluces y castellano y leoneses si Sevilla y Valladolid huelen a adelanto electoral o no. Ambas serían muy malas noticias para el PSOE.
El 40º Congreso del PSOE parece una película de amor y Sánchez su galán
El PSOE parece en este cónclave una película de amor y Sánchez el galán. Con José Luis Rodríguez Zapatero y Felipe González de estrellas invitadas (ambos intervienen este sábado). El presidente y jefe de filas socialista tenía tantas ganas de darse un homenaje que pospuso este Congreso lo que hiciera falta hasta que pudiese ser presencial. De hecho tocaba en junio, pero entonces España estaba recién salida del segundo estado de alarma.
Todo para presumir del buen estado de forma de su partido y de su Gobierno, aunque la ministra de Hacienda ya se las esté teniendo tiesas con ERC y el PNV para lograr su apoyo a los Presupuestos Generales de 2022. Por no hablar de las vías de agua que el modelo de financiación autonómica ha provocado entre las baronías, con posturas muy distintas. A veces enfrentadas.
El partido de la Memoria Democrática olvida rápido cuando se trata de sus caídos
El gran ausente de la primera jornada fue José Luis Ábalos, que tendrá un papel minúsculo este sábado para evitar -más- habladurías. Nadie le lloró este viernes en la Feria de Valencia. La también exministra Isabel Celaá hizo acto de presencia y se marchó al cabo de un rato. A «descansar», dijo. El partido de la Memoria Democrática olvida rápido cuando se trata de sus caídos.
Paseo triunfal en Valencia
Robles pone la única nota discordante y falta a la foto de familia de Sánchez
El hombre del momento es, por el contrario, Félix Bolaños, que se paseó por el 40º Congreso del PSOE casi levitando. Se especulaba en los corrillos que Sánchez podría darle un puesto en la Comisión Ejecutiva Federal del partido. El presidente fue preguntado al respecto por los periodistas pero no lo confirmó. Tampoco lo negó.
Su nueva Ejecutiva se conocerá a lo largo de este sábado. Se da por casi segura la continuidad de la presidenta del partido, Cristina Narbona, y la entrada de varios miembros del Ejecutivo. En julio aumentó la presencia del partido en el Gobierno. Ahora recorre el camino inverso.
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