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29 de marzo de 2024

Pedro Sánchez junto a Valentín Formoso en el cierre del congreso socialista

PSOE

El PSOE cierra su congreso en Galicia entre acusaciones de «tongo» y tensiones internas

El ex líder del PSOE gallego José Ramón Gómez Besteiro ha reaparecido  en primera fila junto al resto de socialistas 

El terremoto del PSOE gallego no ha hecho más que subir de escala. Si bien la celebración de las primarias se marcó en el calendario como un nuevo comienzo para la formación en la región, el perdedor de las elecciones internas, Gonzalo Caballero, no parece asumir los resultados que colocaron a su rival, Valentín Formoso, como nuevo secretario general del partido en Galicia.
El 14 Congreso del PSdeG comenzó este martes en Santiago de Compostela. El punto de discordia lo pusieron los fieles a Caballero que no dudaron en gritar «¡Tongo, tongo!» cuando el presidente del encuentro, Xosé Sánchez Bugallo, no quiso darles la palabra excusado en el guion que ordena este tipo de cónclaves. Los del ex secretario general calificaron lo ocurrido de «congreso a la Búlgara», aludiendo a las reuniones de los comunistas búlgaros donde nadie disentía por miedo a las consecuencias.
Caballero, además de ex líder de los socialistas en Galicia, es también sobrino del famoso alcalde de Vigo, Abel Caballero, con el que mantiene una relación cambiante. Si bien estuvieron una larga temporada sin hablarse, ahora se ha producido un acercamiento entre ambos. Eso sí, el estrechamiento de la relación no se ha traducido en el apoyo del alcalde vigués a la campaña de su sobrino. Abel prefiere mantener la distancia a pesar de la consanguinidad que no impidió a Gonzalo posicionarse a favor de Josep Borrell en un proceso de elecciones internas en las que ganó a Joaquín Almunia, candidato al que apoyaba su tío. Lo mismo ocurrió con las encarnizadas primarias del 2017 cuando el alcalde se posicionó a favor de Susana Díaz, mientras su sobrino se definió como partidario de Pedro Sánchez.
A pesar de los esfuerzos de Caballero, Formoso se hizo con el triunfo en las primarias con el 59% de los votos. El resultado alegró a Ferraz que veía con preocupación el avance del BNG que ocupa la segunda fuerza en el parlamento gallego y no permite al PSOE ocupar el liderazgo de la oposición.

«Permitir la participación»

Gonzalo Caballero ha pedido a su sustituto que permita la «participación» tras el veto a sus listas para los órganos nacionales y federales por parte de la comisión organizadora del Congreso socialista.
«El Partido Socialista debe ser referencia de democracia interna y garantías democráticas. La pluralidad y el respeto a las normas democráticas son cuestiones fundamentales y sostenidas por el marco constitucional y legal», ha lanzado desde su cuenta de Twitter.
El socialista indica que presentó «en plazo» las candidaturas al comité nacional y al federal y denuncia que «quieren impedir que se voten» con la «excusa de que fueron presentadas por correo remitido a la organización».

La vuelta de Besteiro

La candidatura de Formoso estuvo rodeada de la sospecha de que su liderazgo podía convertirse en un paso previo al de José Ramón Gómez Besteiro, que quedó libre de imputaciones a comienzos de este mismo año.
Besteiro renunció a ser candidato en las elecciones autonómicas de 2016 después de ser imputado como presunto autor de seis delitos: soborno, prevaricación, tráfico de influencias, fraude a las administraciones públicas, fraude de subvenciones y delito continuado de malversación de caudales públicos.
En una situación muy distinta, Besteiro ha vuelto a aparecer en el cónclave socialista para apoyar a su amigo Formoso desde la primera fila del encuentro avivando de nuevo los rumores que le colocan de nuevo en la dirección del PSOE gallego.
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