El diputado regionalista de UPN, Sergio Sayas, ayer en el Congreso de los Diputados
Guerra abierta en UPN: los diputados no entregarán el acta y el presidente no descarta expulsarlos
Tras la rebelión de ayer respecto a la Reforma Laboral, han cruzado acusaciones en los medios de comunicación
Lo que era un run-run en círculos privados estalló ayer por la tarde cuando los dos diputados de Unión del Pueblo Navarro (UPN) decidieron desobedecer las directrices de la dirección del partido y votar en contra de la Reforma Laboral del Gobierno de Pedro Sánchez. Entrada ya la noche, la dirección del partido regionalista pidió a los dos diputados que entregaran sus actas porque «no representan» al partido.
Sin embargo, uno de los diputados, Sergio Sayas, ha sido tajante este viernes, «no hemos incumplido ninguna norma interna, considero que no», ha afirmado en declaraciones a Europa Press, por lo que no se plantea ni él ni su compañero, Carlos García Adanero, entregar el acta de diputado.
Para Sergio Sayas, «si sometemos entre nuestros afiliados a referéndum si había que salvar o no a un Gobierno que ha emprendido su camino con el independentismo y, particularmente en Navarra, la decisión sería favorable a la que hemos tomado».
Y ha reprochado que el presidente del partido, Javier Esparza, que les transmitiera la decisión de respaldar la Reforma Laboral a través de la secretaria general de UPN, Yolanda Ibáñez, sin dar más explicación, «no podíamos explicar ni opinar».
En su opinión, se podía haber conseguido más a cambio del voto favorable al Gobierno. Las negociaciones entre el presidente de UPN, Javier Esparza, y el secretario de Organización del PSOE, el navarro Santos Cerdán, se cerraron, que se conozca hasta el momento, con un acuerdo para que el alcalde de Pamplona, Enrique Maya, de UPN, no fuera reprobado en el Ayuntamiento y los socialistas respaldasen una partida presupuestaria de 27 millones de euros.
Para Sergio Sayas, se tenía que haber hablado «de pactos de Estado», porque «es muy importante la reforma laboral pero también que el independentismo no condicione la política; ese acuerdo sí puedo defender».
«Una jugada rara»
El presidente de UPN, Javier Esparza, por su parte, no ha descartado expulsar del partido a los dos diputados. «Vamos a analizar lo que esta ocurriendo. Es gravísimo, estoy tremendamente dolido más allá de lo personal porque la imagen no se ajusta a lo que es nuestro partido, a los valores y a los principios», ha afirmado en declaraciones a Onda Cero.
La imagen no se ajusta a lo que es nuestro partido
Esparza ha calificado lo sucedido ayer en el Congreso de los Diputados de «jugada rara que no lo puede permitir ningún partido». En su opinión «han engañado a todos mintiendo» porque por la mañana aseguraron que iban a acatar la decisión del partido.
Sobre su no comunicación con los dos diputados, Esparza ha señalado que el lunes hubo una Ejecutiva en UPN en la que estuvieron tanto Sayas como García Adanero en la «se encomendó al presidente de UPN y al conjunto de la dirección que fijaran una posición de voto en lo que tiene que ver con la reforma laboral y se trasladara a los dos diputados y eso es lo que hicimos».
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Finalmente, más allá de las contraprestaciones puntuales a cambio del voto favorable a la Reforma Laboral de los regionalistas, Esparza ha puesto en valor que «habíamos abierto un camino de diálogo con el PSOE, con el Gobierno de España para intentar contribuir al desarrollo de Navarra».
Este sábado se celebrará en Pamplona un comité político de UPN en el que se podría decidir el futuro de los dos diputados regionalistas.
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