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Cataluña
La Generalitat relega las preguntas en español al final de las ruedas de prensa
La Generalitat envía a los periodistas un documento con las «normas de régimen interior para el desarrollo de las ruedas de prensa» en la sede del gobierno catalán
La Dirección General de Comunicación del Govern ha enviado a los medios de comunicación un documento que recoge «las normas de régimen interno para el desarrollo de las ruedas de prensa en el Palacio de la Generalitat de Cataluña». Documento que consta de 14 normas que el periodista tiene que firmar para poder «adherirse» a ellas. De hecho, se pide la firma y el DNI. Entre estas normas destaca el punto nueve, que deja claro que las ruedas de prensa «se desarrollan en lengua catalana, si bien, una vez finalizada, se abrirá un turno para que se puedan formular y responder preguntas en otros idiomas». No se hace ni quiera una referencia explícita al castellano.
Desde la Generalitat dicen que el objetivo es que las ruedas de prensa se lleven a cabo «con todas las garantías de seguridad para sus participantes» y también con «pleno respeto de los principios y reglas establecidos por los códigos deontológicos de la profesión periodística». También aseguran que así pretenden «reforzar el derecho constitucional a la información y proteger otros derechos constitucionales merecedores de protección».
Contra la libertad de expresión
Así por ejemplo, en la norma número dos se establece que en las ruedas de prensa «no se podrán utilizar expresiones injuriosas, vejatorias, ni cualquier otra que pueda lesionar los derechos de las personas i/o provocar daño o descrédito a entidades públicas o privadas.
Para el catedrático de derecho internacional de la UAB Rafael Arenas todo esto son «limitaciones a la libertad de expresión», porque en el caso de esta norma, puede suponer que «las preguntas que supongan de manera encubierta una crítica a la Generalitat estarán prohibidas». Y además, recuerda Arenas, «será la propia administración la que juzgará si la intervención se ajusta a estos límites», y por lo tanto, la que decidirá si retira la acreditación al periodista, que es otro de los requisitos imprescindibles para acceder a las ruedas de prensa del Govern.
Otra de las normas, en este caso la número 3, también deja claro que «los periodistas deben cumplirlo que establece el Código deontológico de su profesión periodística en Cataluña». Por todo ello, Arenas considera que no se puede entender que si de lo que se trata es de reforzar el derecho a la información, unas normas de régimen interno pretenden «reforzarlo» cuando ya lo recoge la propia Constitución.
En otras normas se establece, por ejemplo, con cuánto tiempo de antelación tienen que llegar los periodistas, dónde pueden situarse los medios gráficos, o que durante la rueda de prensa los teléfonos móviles deben estar silenciados y no se permitirá atender ninguna llamada.
Un documento que acaba dejando claro que «el órgano competente del Departamento de la Presidencia puede revocar las acreditaciones otorgadas si la persona titular incumple las anteriores normas de régimen interno, previo otorgamiento del trámite de urgencia al interesado o interesada, y si procede, la mediación del Colegio de Periodistas de Cataluña, al que la persona interesada acepta someterse».
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