Félix Bolaños intercambia documentos con el Nuncio en España, el arzobispo Bernardito Auza.
Iglesia Católica
La Iglesia renuncia al ICIO, único impuesto que tenía exento por los Acuerdos de España con la Santa Sede
El Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras es un tributo local que grava cualquier construcción que exija licencia
Se ha llegado a un acuerdo entre el Ministerio de la Presidencia, la Conferencia Episcopal y el nuncio en España, el arzobispo Bernardito Auza
La Conferencia Episcopal ha decidido renunciar al Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO), un tributo que en virtud de una Orden Ministerial de 2001 disfrutaban hasta ahora de su «exención total y permanente». Este impuesto local grava cualquier construcción, instalación u obra que exija la obtención de la correspondiente licencia de obras o urbanística, se haya concedido o no dicha licencia.
Asimismo, a partir de hoy la Iglesia también pagará las Contribuciones Especiales, tributos que se dan cuando un inmueble aumenta de valor tras unas obras.
El acuerdo se ha llevado a cabo fruto del trabajo conjunto entre el Ministerio de la Presidencia y la Iglesia Católica en materia de fiscalidad, el Gobierno de España y la Conferencia Episcopal Española.
La Conferencia Episcopal ha comunicado a El Debate que el ICIO era «el único impuesto que la Iglesia tenía en exención en virtud de los Acuerdos de España con la Santa Sede».
«Como los Acuerdos eran posteriores a la creación de este tributo, una sentencia judicial interpretó que debería estar acogido. Lo que quiere la Iglesia es el mismo régimen fiscal que el resto de las organizaciones que se enmarcan en la Ley de Mecenazgo, y por eso hemos renunciado a su exención», han explicado a El Debate desde la Conferencia Episcopal.
Un acuerdo con Presidencia
La medida se ha tomado tras un encuentro de Félix Bolaños, ministro de Presidencia, con el Nuncio Apostólico, Monseñor Bernardito Auza, y el presidente de la Conferencia Episcopal Española, Monseñor Juan José Omella, en el Palacio de Santa Cruz, en Madrid.
Félix Bolaños y el arzobispo Bernardito Auza
En un comunicado conjunto entre el Gobierno y la Conferencia Episcopal se relata que «el acuerdo se desarrolla en la voluntad compartida entre el Gobierno de España y la Conferencia Episcopal Española de equiparar el régimen fiscal de la Iglesia Católica con las entidades sin ánimo de lucro, conforme al principio de no privilegio y no discriminación».
Bolaños retuerce el pacto
Tras el encuentro, Félix Bolaños ha querido dar su propia versión y ha asegurado que «el nuevo Gobierno está satisfecho que haya terminado los privilegios fiscales de la Iglesia Católica». Además, el ministro de Presidencia ha expresado que «por supuesto con la Iglesia tenemos algunas diferencias», y ha añadido que ahora su situación se «equipara a cualquier organización sin ánimo de lucro».
El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, durante el encuentro con el Nuncio en España
«Esto va a suponer al año más de 16 millones para nuestros Ayuntamientos. Hoy terminan los privilegios fiscales de la Iglesia Católica», ha subrayado Bolaños.
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