Juanma Moreno acusa a Sánchez de seguir una «estrategia letal» para «dividir el país»

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha reclamado este lunes en Sevilla diferenciar entre el clima político que se vive en la capital de España y el resto del país, al afirmar que Madrid es «una caja con un eco que a veces confunde» y defender que «Madrid es Madrid y España es España». Moreno ha hecho estas declaraciones durante una conversación con la periodista Carmen Morodo en la presentación de su libro Manual de convivencia. La vía andaluza, editado por Espasa.

El dirigente andaluz ha insistido en que «Andalucía debería tener mucho más papel en la agenda nacional» porque «está llamada a liderar España», aunque ha apelado a «creer en nosotros mismos» con «trabajo duro y esfuerzo». Sobre su futuro político, ha afirmado que «perder la mayoría absoluta ahora mismo no me lo planteo», convencido de que «la podemos mantener», aunque ha advertido de que «Moncloa está apuntando directamente hacia Andalucía» y ha señalado como «mi adversaria» a la vicepresidenta y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, de quien ha dicho que «tiene unos recursos y medios superiores a los que tenemos».

En su intervención, Moreno ha acusado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de seguir «una estrategia de polarización, de ruido, de construir un muro» para «dividir la sociedad», al considerar que «dividir les beneficia». Ha advertido de que se trata de «una estrategia letal para los intereses del país» porque supone «construir un muro entre unos españoles y otros». «El respeto al adversario es fundamental», ha subrayado, al tiempo que ha reivindicado la «moderación, el diálogo y el respeto» como valores esenciales para la convivencia.

Durante el acto, el presidente andaluz ha abordado también la gestión sanitaria y ha recordado la expresión «tó pa ná», que utilizó en su libro para describir los inicios de su carrera política y que ahora aplica a los retos del Servicio Andaluz de Salud (SAS). Moreno ha asegurado que se propone «hacer una reforma del modelo organizativo de la sanidad pública más eficiente» y ha reconocido su «frustración» por la crisis en los cribados de cáncer, aunque ha defendido que «salva vidas». En un tono más personal, se ha referido a su padre fallecido, a su esposa, Manuela Villena, y a su hijo primogénito, de quien ha dicho que comparte con él «una conversación política amena y sana».