Paque Natural de Collcerola

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Escapadas

Caminar y comer por el Parque Natural de Collcerola de Barcelona

Miles de barceloneses se acercan al parque próximo a la capital catalana

En Barcelona, a pocos metros siempre de donde vive alguno, tenemos el Parque Natural de Collcerola. Un espacio al aire libre, donde miles de barceloneses pueden disfrutar de un espacio único, donde no solo disfrutar del tiempo libre, porque a pesar de estar en Barcelona, uno puede recompensarse con un buen plato gastronómico. Por eso, a pesar de pasear por un lugar excepcional, uno puede disfrutar de varios lugares donde disfrutar de un plato caliente de comida.

Si uno entra en la web del Parque Natural de Collcerola encontrará que tiene más de 20 restaurantes, y eso que nos encontramos en un Parque Natural. De todos ellos podemos escoger los que queramos, pero de todos ellos debemos escoger cuatro que a los caminantes les llenará la barriga y son, por así decirlo, indispensables.

Restaurante Casa Juaco. Con un menú al mediodia de 20 euros, que no ha variado en los últimos 40 años. El menú, el precio ha cambiado de pesetas a euros. Los jueves tienen arroz, el clásico arroz para aquellos que les encanta comerlo este día de la semana. También uno puede disfrutar de su revuelto de setas o callos con garbanzos. En temporada, sirven calçotadas y, los fines de semana, el protagonismo es para la carta, donde destacan los caracoles, las migas y los productos a la brasa. Tiene un desayuno a 12 euros para los madrugadores.

El restaurante Font de les Panes está especializado en arroces y carnes y verduras a la brasa. En temporada uno debe pedir setas y calçots. Es un merendero, así que, cuando la sequía lo permite, se puede alquilar la barbacoa, las mesas y sillas y también comprar leña y carbón para prepararte tú mismo el festival. Incluye unos lavabos y agua potable, que siempre se agradece.

El Restaurante Torent de Can Coll. La carta es la típica de la zona, con calçotadas en temporada y una buena oferta de productos a la brasa. No pueden faltar clásicos de nuestra cocina como la esqueixada, espinacas o habas a la catalana. A destacar, un chuletón de carne de Girona. También es merendero. Los madrugadores pueden pedir tostadas con butifarra, beicon,queso, o tortilla al gusto, puede ser de patatas, alcachofas, atún queso, ajos tiernos, espinacas, calabacín, jamón… Esto dependen del caminador y el hambre que tenga.

Finalmente, tenemos el Mirador de Can Cases. Situado en una masía del siglo XVI, con unas vistas espectaculares al Vallès, el restaurante Can Cases tiene una oferta más refinada. Tanto la carta, como los espacios, son los de un restaurante rural moderno, lo que lo diferencia de los merenderos que hemos visto hasta ahora.

Las croquetas o las bravas conviven con el hummus, el yummys de boniato o las delicias de brie. Sirven un trinxat de la Cerdanya, un timbal de escalivada y también la hamburguesa de Beyond burguer. Las brasas son en Josper y puedes acompañar las carnes de patatas fritas, una mazorca de maíz o, si prefieres algo diferente, un wok de verduras.

El desayuno contundente solo lo ofrecen los fines de semana, en el que destacan los huevos estrellados con butifarra de payés, la butifarra de payés a la brasa con seques (alubias blancas salteadas con manteca) o las manitas a la brasa también con seques.

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