
Iván Ania, durante un entrenamiento
El Córdoba CF sigue siendo el rey
Nadie en Segunda División acumula tantos movimientos en el mercado cuando este apenas lleva abierto una semana
Es raro encontrar, tirando de hemeroteca, una temporada en la que el Córdoba CF tuviera tanto trabajo adelantado antes de comenzar a entrenar de nuevo en verano. En las últimas campañas la tónica habitual ha sido cerrar las plantillas en las postrimerías del mercado, circunstancia que pesó en los arranques, por ejemplo, de los dos ejercicios que lleva Iván Ania como técnico del conjunto blanquiverde.
En esta ocasión, el Córdoba ha dejado el trabajo prácticamente visto para sentencia. Restan algunos casos de interés, como el posible regreso de Alberto del Moral y la llegada de un atacante más, mientras que una hipotética salida de Álex Sala activaría la opción de hacer una incorporación adicional en el centro del campo; es decir, todo a falta de retoques. Ahora, como contábamos ayer, lo principal es aligerar una plantilla con un notable excedente de futbolistas.
Así, en la categoría ha sido una semana de muchos movimientos. Quizá los más llamativos han llegado en Valladolid, que por fin ha confirmado a Víctor Orta como su nuevo director deportivo y ha acordado la cesión de Guilherme Fernandes, joven portero procedente del Real Betis. Además, el Castellón ha comunicado hasta tres nuevos refuerzos: Diego Barri, Serpeta y Doué, mientras que el Leganés ha confirmado los fichajes de Figueredo e Ignasi Miquel.
En cuanto a los recién ascendidos, el Andorra sigue fuerte en este mercado. A los fichajes de Marc Domenech y Carrique ha unido las ampliaciones de contrato de jugadores de una importancia capital como Lautaro de León, Cerdà, Sergio Molina o Marc Bombardo, mientras que la Cultural y Deportiva Leonesa ha firmado a Édgar Badía para la portería y Juan Larios (por el que se interesó el Córdoba el pasado mercado invernal) para el lateral zurdo.
Un impulso a la campaña de abonos
Además, el club blanquiverde anunció anoche que traspasó la barrera de los 10.000 abonados. Todo eso cuando aún queda una semana entera para terminar con el periodo de renovaciones, por lo que se espera que la cifra final en este primer tramo se aproxime a los más de 16.000 que tuvo el Córdoba el ejercicio pasado. El tope está en los 17.000 y el ritmo, a tenor de lo visto, parece que se va cumpliendo para poder alcanzar el mágico número.