El Córdoba CF por fin dice adiós al verano (1-1)

El Córdoba CF cerró su pretemporada con solo una victoria: la del debut en Pozoblanco. A partir de ahí, derrotas ante el Betis (3-4), Al-Arabi (3-0) y Betis Deportivo (0-1) y un empate, el de esta noche ante el Cádiz (1-1). Iván Ania se lo tomó como la prueba más fiable de cara al inicio de liga y el conjunto blanquiverde enseñó una imagen bastante cercana a su realidad. Arriba mostró que tiene potencial para generar, pero atrás es un equipo extremadamente sensible. Hoy volvió a ser una muestra de ello. Pese a todo, el Córdoba tuvo fases reconocibles y otras, en el tramo final, de buen juego. Pero el que se llevó el trofeo a casa, en penaltis, fueron los amarillos.

A los puntos, mejor el Córdoba en la primera parte

Estaba cantado desde ayer, pero esta noche quedó reflejado que este es el equipo que Iván Ania ve para El Molinón. Con algunos matices, pues lo normal es que se apure por Rubén Alves y Fomeyem no sea el titular. Se lo tomó en serio el Córdoba y eso se trasladó a los primeros minutos, donde la imagen de los cordobesistas fue muy diferente a la de los últimos partidos. Los acercamientos iniciales tuvieron como protagonista a Jacobo. Primero con un disparo forzado y después con un envío desde la izquierda que Guardiola mandó fuera.

El Cádiz, orbitando alrededor de Suso y Ontiveros, tuvo la suya en una acción a balón parado protagonizada por ambos. El tiro del exsevillista lo mandó a córner con una buena mano Carlos Marín. A partir de ahí, el Córdoba se asentó y empezó a generar peligro real. La mejor la tuvo Carracedo tras el saque rápido de una falta lateral. El ‘23’ se plantó en una posición franca para hacer el 0-1, pero Aznar lo evitó con una buena parada. Después fueron Guardiola, con un cabezazo fuera, y Álex Sala, con un disparo desde la frontal, los que pudieron avanzar a los blanquiverdes en el Carranza.

Sin embargo, el cuadro cadista respondió con dos ocasiones reseñables. Una en las botas de De la Rosa que salió rozando la escuadra y otra en la que Fomeyem resultó providencial tras un desajuste de Sintes al tirar el fuego de juego. Circunstancia que se repitió minutos antes del descanso y que García Pascual no supo aprovechar antes de que Orellana Cid decretase el final de una competida primera mitad.

El Cádiz castiga en cuanto puede

La segunda mitad trajo consigo algún cambio en el Cádiz y continuidad en el Córdoba, que no conseguía generar peligro más allá de alguna acción aislada de Jacobo. Se notaba que había bajado el ritmo y eso no se lo puede permitir un equipo que vive prácticamente de eso.

Así, si un pasador como Ontiveros recibe solo, se gira y tiene todo el tiempo del mundo para filtrar un pase, ocurre que el gol te puede caer el cualquier momento. Y así pasó. Gran envío del cadista al espacio, Fomeyem fuera de sitio y Climent, ganándole la partida a un Carlos Isaac que se olvidó de cerrar, hacía el 1-0. Y pudo ser peor, pues minutos después fue Xavi Sintes el que estuvo a punto de batir su propia portería después de una gran acción individual de Ocampo. Solo el larguero lo evitó.

Kevin Medina reactiva al Córdoba y lo aprovecha Sergi Guardiola

Y, mientras el Cádiz vivía su tradicional carrusel de cambios, Iván Ania introdujo a Kevin Medina en el campo para seguir dándole minutos. Poco tardó en demostrar la razón por la que debe ser diferencial. Probó a su par en varias ocasiones, dejó alguna descarga de nivel y se asoció bien en la zona de tres cuartos. Ahí volvió a resurgir la figura de Carracedo, lugar por el que el Córdoba tuvo sus mejores oportunidades tras el tanto local. Jacobo, con un disparo fuera e Isma Ruiz, que obligó a emplearse a fondo a Aznar, rozaron el 1-1.

Igualada que llegó de la mano, de nuevo, de una acción por la izquierda de Kevin Medina. Recibió el malagueño, se perfiló para buscar disparo con la derecha y Guardiola, atento al rechace, embocaba a placer para hacer el gol del empate. A partir de ahí, el arreón cordobesista pudo incluso acabar con el 1-2, pero Carlos Isaac no acertó tras un gran servicio desde la izquierda.

El Cádiz se impone en la tanda

El Carranza se decidió en penaltis y, en esa suerte, brilló la figura de Aznar. El portero local paró los lanzamientos de Guardiola e Isma Ruiz, mientras que el Cádiz solo erró el primero. A partir de ahora, todo será fuego real. El Molinón aguarda ya al Córdoba.