Un estudio para Plenoil evidencia que la subida de precios condiciona el repostaje de combustible.

Un estudio para Plenoil evidencia que la subida de precios condiciona el repostaje de combustible.LVC

Hábitos de consumo en Andalucía

La subida en el precio del combustible condiciona un mayor repostaje en gasolineras de bajo coste

El 65% de los conductores desconoce que la calidad del combustible de las estaciones de servicio automáticas y las tradicionales es la misma

El impacto que el contexto económico actual está teniendo en el bolsillo de los consumidores ha incrementado el número de conductores españoles que repostan en gasolineras automáticas. Así lo pone de manifiesto el estudio Hábitos de consumo de combustible en España, elaborado por Plenoil, compañía líder en el sector de las estaciones de servicio automáticas, en el que observa que 6 de cada 10 conductores en Andalucía (62,07%) suelen repostar en estaciones de servicio de bajo coste, frente a un 31,03% que reconoce ser cliente habitual de las gasolineras tradicionales. Asimismo, del segmento de conductores que recurren a las gasolineras automáticas, más de la mitad (35,54%) ha comenzado a hacerlo recientemente con el fin de asumir el menor precio posible.
Entre los motivos que han impulsado este cambio de tendencia hacia las gasolineras automáticas, 7 de cada 10 andaluces aseguran que es el precio del combustible el factor principal que los lleva a elegir repostar en una gasolinera u otra en su día a día (72,41%), seguida de la ubicación (44,83% -destacando la franja de edad de más de 35 años-), los servicios que ofrece más allá del repostaje del combustible (23,61%) y la atención al cliente (13,26%).
«Los resultados obtenidos en este estudio ratifican algo que ya veníamos afirmando: el modelo de negocio de las gasolineras automáticas que buscan ofrecer el mejor precio posible está respondiendo a las necesidades de los conductores en España. El contexto actual de inflación está apretando cada vez más al consumidor, obligándole a asumir elevados gastos a la hora de adquirir productos que son esenciales en su día a día. Por ello, es fundamental impulsar medidas que desahoguen al usuario, salvaguardando su economía ante situaciones críticas, como la que vivimos desde hace meses, para tratar de impactar positivamente en su calidad de vida», señala José Rodríguez de Arellano, CEO de Plenoil.
Desde hace algunos meses, los conductores han tenido que hacer frente a una escalada progresiva en el precio del combustible que ha llegado a superar en varias ocasiones sus máximos históricos. Para paliar los elevados costes, el Gobierno implantó un descuento temporal de 20 céntimos por litro de carburante, una medida que apoya un 69% de los andaluces -de ellos, al 12,73% le parece correcta, mientras que el 56,23% cree que es insuficiente (principalmente, las mujeres)-. Por el contrario, el 31,03% opina que no es una buena solución. «Desde Plenoil vamos a apoyar toda medida que beneficie al ciudadano y que suponga un ahorro», opina Rodríguez de Arellano.

Un modelo a la medida del consumidor

Otro de los aspectos a favor de las gasolineras automáticas es su ubicación. Solo un 10,08 % de la muestra de Andalucía ha indicado que reposta habitualmente en carretera (mayoritariamente, jóvenes menores de 35 años), decantándose la mayoría de los conductores por las estaciones de servicio ubicadas en zonas urbanas (43,50%), seguidas de aquellas que se encuentran en las inmediaciones de un pueblo o ciudad (28,12%) y en polígonos industriales (18,30%).
«En Plenoil estudiamos en profundidad dónde colocar las estaciones de servicio para que estén lo más cerca posible de nuestros clientes, evitando que realicen desplazamientos innecesarios que supongan un incremento del combustible consumido y, consecuentemente, de la emisión de gases contaminantes», asegura José Rodríguez de Arellano. «En este sentido, el 61% de las gasolineras de Plenoil se sitúan en ciudad, un 18% en inmediaciones urbanas y un 21% en polígonos industriales», añade.
Además de un precio competitivo, lo que más valoran los conductores en esta región de una gasolinera low-cost es que esté operativa las 24 horas del día, los 365 días del año (39,52%). Le sigue de cerca que disponga de varios surtidores para evitar largas esperas (25,46%). En este sentido, cabe destacar que los andaluces también valoran positivamente que las estaciones de servicio sean automáticas para agilizar el proceso o que cuenten con expendedores, es decir, personal a pie de pista que asiste en el repostaje. «El secreto está en diseñar una estructura de costes más eficiente para poder brindar al cliente lo que necesita: un servicio rápido, sencillo y asequible», reconoce el CEO de Plenoil.

Combustible de calidad

El elevado precio de la gasolina y el gasoil ha provocado que muchos conductores dejen de mirar con recelo las estaciones de servicio de bajo coste, aun desconociendo o cuestionando si el producto que ofrecen es de igual o inferior calidad. Preguntados por las diferencias entre el combustible que ofrecen las gasolineras de nueva generación y las tradicionales, el 65% de los conductores de Andalucía desconoce que la calidad es la misma. Esto es, solo el 34,22% de los encuestados opina que es el mismo y, por tanto, tienen la misma calidad, frente al 40,58% que considera que el combustible de las gasolineras low-cost es de menor calidad y el 25,20% restante, que asegura no saber la respuesta.
De aquellos que creen que el combustible es de inferior calidad, el 43,8% afirma que lo único que cambian son los aditivos, frente a un 33,3% que cree que tanto el combustible como los aditivos son distintos y un 22,8% que desconoce la diferencia pero que sigue considerando que la calidad es inferior.
«Es necesario despejar las dudas y combatir los mitos que existen en torno a la calidad del combustible. Nuestro modelo de negocio se sostiene gracias a una estructura ajustada y la eliminación de costes innecesarios que puedan repercutir en lo que paga el cliente, lo que significa que ofrecer carburante a un precio accesible no supone renunciar a la calidad», concluye José Rodríguez de Arellano. «Plenoil se surte fundamentalmente de la compañía logística Exolum y el combustible que provee está sometido a los mismos controles exhaustivos y periódicos que el resto, realizados por una entidad independiente y certificada. Por lo tanto, todo el combustible que se vende en nuestro país es el mismo, la única diferencia son los aditivos que añaden opcionalmente las marcas y que en Plenoil es de máxima calidad», explica.

Alternativas al uso del coche

Para hacer frente al alto precio de gasolina y diésel, 4 de cada 10 conductores andaluces (40,05%) ha valorado la opción de recurrir al transporte público u otras alternativas de transporte. En España esta realidad afecta principalmente a mujeres y jóvenes de 18 a 35 años de clase socioeconómica baja, aunque cabe subrayar que un notable porcentaje de personas con poder adquisitivo alto (40,71%) han contemplado también esta opción.
Por el contrario, alrededor del 60% de los encuestados en esta región no ha considerado otras alternativas de transporte, el 26,26% continuará haciendo uso de su vehículo como hasta ahora, el 15,92% seguirá utilizándolo, pero no con la misma frecuencia y el 17,77% restante empleará su coche con normalidad, buscando siempre las opciones más económicas para ello.
«El consumo de combustible contribuye a la permanencia de un servicio esencial para la sociedad: la movilidad. La crisis económica que afecta a nuestro país resulta cada vez más evidente, condicionando incluso la autonomía de los conductores que precisan de un medio de transporte para desplazarse, ya sea con fines personales o profesionales. Como consecuencia, estamos observando un cambio de paradigma en el sector de las gasolineras en favor de las compañías de nueva generación», apunta José Rodríguez de Arellano.
Este estudio ha sido realizado por Sondea para Plenoil y la muestra ha estado compuesta por un total de 2.000 mujeres y hombres de 18 a 65 años. Prácticamente la totalidad de los encuestados en Andalucía (99,53%) es conductor habitual de un vehículo de gasolina (42,97%) o diésel (49,87%), mientras que el 6,90% es conductor de ambos. La muestra solo ha registrado un 0,27% de conductores que utiliza un vehículo híbrido o eléctrico (principalmente, mayores de 55 años con un poder adquisitivo alto).
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