Una expedición confirma que Córdoba tuvo playa: dónde y cuándo

Hace ocho millones de años, literalmente, Córdoba tenía playa. Algunas partes, tal y como explica la revista Viajar y según los resultados de la Expedición 401 del International Ocean Discovery Program, «había zonas de la provincia que no emergían a la superficie y formaban parte de un segundo estrecho, situado al norte del de Gibraltar».

La expedición compuesta por un grupo de 27 científicos de más de quince países, entre los que se encuentran tres españoles, ha analizado el intercambio de agua entre el mar Mediterráneo y el océano Atlántico y ha confirmado que, además del Estrecho de Gibraltar, en Andalucía «existió un segundo canal situado más al norte, el llamado Estrecho Bético. Esto se ha podido determinar, entre otras cosas, gracias al hallazgo de sedimentos marinos a ambos lados del estrecho», explican desde Viajar.

Este segundo corredor se extendía desde Murcia hasta la provincia de Cádiz, pasando a través de un canal por Jaén, Sevilla y Córdoba.

Dónde

En el mioceno, y tal como se desprende de informe, los territorios que hoy conocemos como Lucena o Montilla estarían sumergidos bajo el agua y formarían la playa de Córdoba. Por lo que desde la capital, la costa más cercana estaría a menos de 40 kilómetros.

Además, y tal y como avanza la publicación española, el corredor Bético «jugaba un papel crucial en el intercambio de agua entre el Mediterráneo y el Atlántico» y su cierre «supuso el aislamiento del mar, que vio cómo reducía de manera drástica el agua al aumentar la evaporación». Dando lugar a un descenso del Mediterráneo de hasta 1.500 metros con respecto a su nivel actual.

El estrecho suponía una «regulación del clima en la zona, que gozaba de temperaturas más estables y templadas, gracias al mayor intercambio de agua entre el Mediterráneo y el Atlántico. Las corrientes oceánicas a nivel mundial también se vieron alteradas».