Almeida acusa a la izquierda de utilizar la muerte de un magrebí a manos de un policía para «criminalizar» al cuerpo

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha criticado este viernes que desde la izquierda se esté tratando de utilizar la muerte de un inmigrante magrebí a manos de un policía municipal en Torrejón de Ardoz para «criminalizar» a todo el cuerpo y a todas las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

La jueza de Instrucción número 1 de Torrejón de Ardoz acordó ayer la puerta en libertad con medidas cautelares -retirada de su pasaporte y también su obligación de acudir a la sede judicial para firmar cada lunes- del agente, que ahogó al fallecido, de 35 años de edad, después de que este intentara robarle el móvil. El policía, que según confirmó este jueves el Consistorio madrileño ha sido suspendido temporalmente y expedientado, está siendo investigado por un presunto delito de homicidio por imprudencia.

«Quiero ser especialmente escrupuloso respecto a esa situación y respeto la actuación del procedimiento judicial. Creo que es liberado por parte de la UGT, lo cual a nadie debe extrañar porque es una figura que existe dentro de lo que es el ámbito sindical», ha manifestado Almeida este viernes desde la biblioteca pública municipal Francisco Umbral.

Almeida ha cargado contra aquellos que «pretenden criminalizar a la Policía Municipal» y ha mostrado su apoyo a la labor que realizan las fuerzas de seguridad, que es «imprescindible para tener los ratios de convivencia y de seguridad» que tiene la ciudad en estos momentos.

«Aprovechar ese fatal incidente que se produjo el otro día en Torrejón para descalificar y desprestigiar a la Policía Municipal, por ahí sí que nosotros no vamos a pasar. Vamos a seguir protegiendo y respaldando y, por supuesto, que se tengan que depurar las responsabilidades judiciales como corresponde a un proceso que ya está en marcha y abierto», ha subrayado.

Asimismo, el regidor ha recordado que la condición de Policía Municipal de este agente se mantiene «mientras no haya una sentencia que fuera condenatoria».