Su frasco de líneas limpias y puras se ha convertido en un icono
Belleza
Chanel celebra los cien años de su emblemático Nº5
La maison francesa homenajea este revolucionario perfume con una colección especial
Marilyn Monroe solía decir que solo dormía con unas gotas de Chanel Nº5. Aunque las palabras de la actriz aún resuenan medio siglo después de ser pronunciadas, el aroma que evoca el conocido perfume es aún más destacado. Este año la maison francesa celebra el centenario de esta fragancia creada en 1921 por Ernest Beaux, «un perfume de mujer que huela a mujer y no a una rosa» que revolucionó con su esencia, rompió moldes y se convirtió en el primero en formar parte de la colección permanente del Museo de Arte Contemporáneo de Nueva York (MOMA).
Gabrielle Chanel dijo que no había elegancia posible sin perfume. Por eso, le dio a Beaux las directrices exactas de cómo quería la creación: que no fuera prisionero de su tiempo, que tuviera notas atemporales y abstractas y que no estuviera sometido a tendencias. Parece que lo consiguió porque cien años después sigue siendo uno de los elementos más icónicos.
Para homenajearlo, la Alta Joyería Chanel ha creado la Colección Nº5, en el que destaca especialmente un collar que refleja los rasgos característicos del frasco del perfume. Setecientos diamantes rodean a uno mucho más grande flawless de 55,55 quilates. Orquestada por Patrice Leguéreu, director del estudio, afirmó que quiso redescubrir el alma del Nº5, desde la explosión olfativa de este a la arquitectura de su característico frasco de cristal.
Porque si por algo destaca no es solo por ese aroma que mezcla más de 80 ingredientes, entre los que no hay ni una nota floral, sino también por romper con la habitual estética barroca de los frascos de los años 20 y optar por un diseño de líneas sencillas y sobrias que apenas ha sido alterado y que siempre ha estado encumbrado por el mítico tapón que imita la silueta de la Place de la Vendôme en París.
La modista quería un perfume de mujer que oliera a mujer
El diseño lo realizó la propia Coco, que también eligió el característico nombre. Hay quien cuenta que el perfumista le dio a elegir entre diez posibilidades y la modista eligió la quinta. Sin embargo, las fuentes más fiables apuestan a que era el numero de la suerte de la diseñadora francesa. Lo asociaba a su signo del zodiaco (el quinto), a los dedos de la mano, las puntas de una estrella, los sentidos y los sabores. Otras versiones dicen que vio en él el culmen del minimalismo: un nombre sencillo y sin necesidad de traducir, a juego con la simpleza del tarrito.
Actrices y modelos como Catherine Deneuve, Marion Cotillard, Nicole Kidman o Gisele Bündchen han sido embajadoras del perfume en campañas de publicidad tan conocidas que sus anuncios se han convertido en unos de los más esperados de la marca. La soñadora evocación y el componente aspiracional de cada una de las historias que muestran son completamente inspiradoras y dignas de ver.
Para celebrar este centenario, la firma ha lanzado una colección inédita. Diecisiete productos de edición limitada inspirados en objetos cotidianos que recuerdan que perfumarse con el Nº5 transforma el día a día, entre los que se encuentran una pastilla de jabón, una loción corporal, un gel de ducha, una loción corporal o una misteriosa caja con su famosa crema de manos.
«A través de 100 años de celebridad, queremos mostrar que un objeto no es icónico por nacimiento, sino que lo es por lo que transmite, lo que le da vida, lo que dice sobre su tiempo. N° 5 ha logrado trascender el tiempo y contar la historia de los tiempos. Celebramos que haya mantenido su espíritu audaz y su frescura después de 100 años de pasión compartida con sus fans», explican desde casa francesa.
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