Niños
Todas las veces que los hijos salvaron a sus padres
Diversas anécdotas muestran la importancia de enseñar a los más pequeños qué es lo que han de hacer en casos de urgencia: cuál es el número de los servicios de emergencia, tan fácil como 112, o cuál es la dirección en la que viven
La pasada semana una niña de nueve años en Brockton, Massachussets, consiguió salvar a sus padres de una intoxicación por monóxido de carbono y de una muerte segura, según ha publicado la CNN. La joven, llamada Jayline Barbosa, escuchó gritar a su padre y cuando acudió donde él estaba, se encontró a su madre en el suelo sin conocimiento.
En ese momento, Jayline cogió el móvil del adulto para llamar a los servicios de emergencia. Sin embargo, el teléfono se encontraba bloqueado –era un Iphone con reconocimiento facial–, pero ella fue capaz de sujetarlo frente a la cara de su padre, que estaba muy débil por la cantidad de monóxido respirado, y desbloquearlo. Fue entonces cuando se puso en contacto con el 911. Con posterioridad a los hechos su padre dijo de ella que se había comportado muy inteligentemente. «Si no hubiese sido por ella no sé que habría ocurrido», dijo su padre tras lo ocurrido.
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Una situación similar tuvo lugar el verano del pasado año en Telford, Inglaterra, cuando Josh Chapman, de cinco años, avisó a las autoridades de que su madre estaba sufriendo un coma diabético. El pequeño supo como contactar con los servicios de emergencia puesto que en su juguete favorito, una ambulancia, aparecía escrito el número `112´. Josh encontró a su madre inconsciente en el suelo, según informa The Daily Record, y rápidamente se dispuso a llamar, aunque su madre confirmó después que Josh nunca había utilizado un teléfono móvil. Cuando el 112 descolgó la llamada, los agentes pudieron escuchar al otro lado de la línea la voz del niño diciendo: «mamá estaba jugando con los coches y ahora tiene los ojos cerrados».
Pequeños héroes
Sin ir más lejos, en España también se han dado casos como los anteriores. El pasado diciembre en Valencia, un niño de tan solo cuatro años avisó al resto de la familia por audios de WhatsApp de que su madre se encontraba inconsciente. La mujer, que estaba embarazada, había sufrido un accidente vascular y se desmayó antes de poder pedir ayuda. Sin embargo, gracias a que su hijo alertó al resto de la familia, los servicios de emergencia pudieron llegar a la vivienda.
La madre de Alba sufrió una hipoglucemia el pasado mes de abril. Su hija, de siete años, no fue capaz de desbloquear el teléfono de su madre, aunque lo intentó, y leyó en la pantalla `S. O. S´. Así fue como se puso en contacto con el 112. Alba ya sabía qué tenía que hacer para ayudar a su madre: darle un batido, una Coca-Cola, agua con azúcar o un zumo, pero nada de eso funcionó aquella mañana. La pequeña comunicó a los servicios de emergencia que su madre había tenido una bajada de azúcar y cuál era la dirección de su vivienda para que pudieran acudir cuanto antes.
Estas anécdotas muestran la importancia de enseñar a los más pequeños qué es lo que han de hacer en casos de emergencia. Conocer cuál es el número de los servicios de emergencia, tan fácil como 112, cuál es la dirección en la que viven o en casos más concretos, qué han de hacer, si como la madre de Alba, alguien de la familia tiene una bajada de azúcar, pueden hacer de los más pequeños los héroes de la casa.
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