Iñaki Urdangarin, con su hijo durante unas vacaciones en Bidart
Iñaki Urdangarin, vacaciones en Formentera sin su novia Ainhoa Armentia
El todavía marido de la Infanta Cristina pasa su verano, en compañía de dos de sus hijos, pero sin rastro de su novia
Está siendo un año duro para Iñaki Urdangarin. El primer semestre del 2022 ha estado indudablemente marcado por la ruptura con Cristina de Borbón, previa aparición en su vida de Ainhoa Armentia. Todo un escándalo que enseguida saltó a los medios de comunicación y por ende a la sociedad. Día y noche esquivando a la prensa, dando explicaciones y evitando ser visto junto a la que era su nueva pareja. Entre medias, un comunicado de interrupción de su matrimonio con la hija de Don Juan Carlos y Doña Sofía y el inicio de los trámites de divorcio.
Quizá por eso, el exduque de Palma esperaba el verano con especial impaciencia, pero ya ha llegado. Urdangarin ha hecho las maletas y se ha marchado hasta Formentera, un lugar que le es familiar. Allí es donde pasaba felices temporadas junto a la Familia Real Española, cuando ninguna polémica le salpicaba, estaba completamente incluido dentro del núcleo duro de los Borbones y su matrimonio con Doña Cristina era sólido. Poco o nada queda de aquellas épocas y hoy el escenario es completamente diferente.
Como quiera que sea, el hijo de Claire Liebaert ha sido visto por los fotógrafos mientras disfrutaba de los encantos de la isla balear. No ha viajado solo sino en compañía de dos de sus hijos, Pablo y Miguel. Los tres han sido vistos paseando por las calles de Formentera en actitud muy relajada, vestidos de manera informal, con ropa cómoda, y sonrientes. Daba la sensación de que estaban exentos de preocupaciones.
Ainhoa Armentia en Vitoria
Quien no ha formado parte de este plan de Iñaki Urdangarin ha sido Ainhoa Armentia. Ambos han empezado por separado el que es su primer verano desde que son pareja. Su distanciamiento respecto a los primeros meses es evidente, algo que ha despertado los primeros rumores acerca de una posible ruptura. Ninguno de los dos se ha pronunciado, pero se esgrime desde sus entornos que quieren ir muy a poco. Aún no viven juntos pese a que el pasado mes de abril se habló de que habían alquilado una casa en una de las urbanizaciones más lujosas de Vitoria. Iñaki está volcado en su faceta como padre y a la espera de solventar de manera oficial su divorcio de la madre de sus hijos, algo que no se producirá hasta pasado el verano. Por su parte, Armentia también inició los trámites para liquidar su matrimonio de manera paralela. En este compás de espera, ambos dan pasos lentos pero seguros. Su futuro pasa por estar juntos, pero no quieren equivocarse ni dañar a personas que han sido muy importantes en su vida.
A la espera de nuevas noticias, Iñaki Urdangarin descansa en las playas baleares. No hay que olvidar que desde el pasado mes marzo disfruta de la libertad condicional, después de que la juez de Vigilancia Penitenciaria del País Vasco, Ruth Alonso, aprobase el «adelantamiento cualificado» de su excarcelación que había propuesto para él la cárcel de Zaballa (Álava).
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