La Policía francesa detiene a más de 20 personas relacionadas con la ola de ataques a las cárceles

Las Fuerzas de Seguridad del Estado de Francia detuvieron, este lunes, a unas 25 personas en redadas por todo el país tras una serie de ataques coordinados contra diferentes prisiones. Los arrestos se produjeron a primera hora de la mañana en las afueras de París, así como en Marsella, Lyon y Burdeos.

Las acciones de estos últimos días fueron reivindicados por un grupo llamado DDPF –que podría traducirse como Defensa de los Derechos de los Presos Franceses– y las autoridades han llegado a sacar de prisión y poner bajo custodia policial a cinco presos considerados como los principales instigadores de los ataques.

Los detenidos asaltaron este mes varias cárceles y otros centros de Francia incendiando coches, disparando con armas automáticas y dejando misteriosas inscripciones en los muros de las prisiones. Estos asaltos han puesto contra las cuerdas al Gobierno galo, cuyos ministros de Justicia e Interior, Gerald Darmanin y Bruno Retailleau, se han comprometido a intensificar la lucha contra las redes del narcotráfico.

«Gracias a los magistrados y a las fuerzas del orden por detener a los presuntos autores de los ataques contra los funcionarios de prisiones y las cárceles de nuestro país esta madrugada», señaló Darmanin en su cuenta de X, antes Twitter. Asimismo, el ministro de Justicia francés aseguró que siguen «comprometidos con la ley y con la República en nuestra lucha sin cuartel contra el narcotráfico».

Darmanin confesó que esta oleada de ataques contra las cárceles francesas podría estar relacionada con su plan de encerrar a 200 de los 700 narcotraficantes más peligrosos de Francia en dos prisiones de máxima seguridad. Según explicó, este nuevo proyecto legislativo establece «un régimen penitenciario que será muy duro, como lo fue contra la mafia en Italia, con cárceles de seguridad que antes no existían para aislarlos del resto de la sociedad».