Un Porsche es protagonista de este récord
Seguridad vial
Cazan el mayor récord de velocidad en carretera abierta: revienta el radar
Afortunadamente hace años estos brutales excesos de velocidad era mucho más habituales que ahora, que pueden calificarse como anecdóticos
La Dirección General de Tráfico considera que los excesos de velocidad están entre las tres primeras causas de accidente, es cierto que ahora parece más acertado hablar de velocidad inadecuada, pues tan peligroso es el que va muy rápido en una autovía como el que va muy despacio.
Lo que es completamente innegable es que las consecuencias de los excesos de velocidad se dejan notar con mucha facilidad en los accidentes, pues son mucho más graves cuanto más rápido van los vehículos involucrados, no cabe la menor duda.
Más velocidad, más riesgo
Afortunadamente y al menos en España, los grandes excesos de velocidad son casi anecdóticos y lo que sí se da frecuentemente son pequeños descuidos de conductores que superan en 5 o 10 kilómetros a la hora la velocidad máxima de una carretera, lo que ha disparado el número de sanciones.
Cada vez hay más radares que sancionan a más conductores
Lo realmente preocupante son los grandes excesos de velocidad, como este registrado recientemente en una autopista germana, donde la Policía ha pillado al conductor de un Porsche que rondaba los 325 kilómetros a la hora, velocidad más que suficiente para que despegue un avión.
Casi 800 caballos
Estamos hablando que el coche de marcador superaba ampliamente los 330 kilómetros a la hora, en este caso concreto se trata de un Porsche Panamera Turbo S Hybrid, un coche que cuesta unos 240.000 euros, con una potencia de 782 caballos, una velocidad máxima de 325 kilómetros a la hora y una aceleración de 0 a 100 kilómetros a la hora de 2,9 segundos.
Se trata de un verdadero obús que circulaba 200 kilómetros/hora por encima del límite de velocidad de la carretera, 120 km/h. En España se enfrentaría a un delito y como tal tendría un juicio con posibilidad de ir a la cárcel.
Este tipo de excesos de velocidad no son habituales, pero suceden
Hace años un Porsche 911 se estrelló en Alemania contra el pilar de un puente a 280 km/h y el vehículo literalmente se desintegró, mientras que el puente tuvo que ser completamente reconstruido.