Ad limina apostolorum
Los obispos de las provincias eclesiásticas de Granada, Sevilla y Mérida-Badajoz han comenzado la visita ad limina apostolorum. Los prelados de estas diócesis se encuentran en el Vaticano desde el pasado lunes, 17 de enero, hasta el viernes 21; momento central de la visita, ya q es cuando está prevista la audiencia con el Santo Padre, a partir de las 10:30 horas.
Durante el martes 18, la actividad comenzó con la celebración de una Eucaristía en la basílica de San Juan de Letrán, presidida por el arzobispo de Sevilla, José Ángel Saiz. En su homilía, ha invitado a todos los pastores y a los fieles a incrementar la comunión con el sucesor de Pedro, con el Pontífice.
La tercera jornada de la visita ad limina ha dado comienzo en la basílica de Santa María la Mayor, con una misa oficiada por el obispo de Mérida-Badajoz, Celso Morga, quien en su homilía ha invitado a estar unidos como los apóstoles y a perseverar en la oración, «porque el Señor nos pide que recemos».
En una entrevista para Vatican News, Jesús Catalá, obispo de Málaga, ha indicado las distintas visitas que se encuentran realizando estos obispos, junto con los desafíos y nuevos retos de su diócesis.
Ha destacado que la visita ad limina apostolorum también tiene una parte litúrgica muy bonita, que es la celebración Eucarística en las cuatro grandes Basílicas: San Pedro, donde estuvieron este lunes; San Juan de Letrán, Santa María la Mayor y en San Pablo Extramuros. El viernes 21 de enero, tendrán el encuentro con el Santo Padre y el sábado con la Secretaría de Estado, aunque de momento se desconoce si podrá tener lugar ante el positivo en coronavirus de Pietro Parolin, secretario de estado del Vaticano.
Al referirse a los desafíos y a la realidad de la Iglesia en Málaga, Catalá explicó que «Málaga es una diócesis grande, en población es la quinta de España. En Málaga, señaló su Obispo, hay una religiosidad popular muy fuerte, el tema de las cofradías que son por centenares. Además, podemos decir que hay una idiosincrasia especial en la espiritualidad en general, en la vivencia de la Iglesia y de la fe». Asimismo, el Prelado español afirmó que en la diócesis hay presencia de gente que viene de fuera, hay una inmigración de países que vienen buscando trabajo, sobre todo, de Latinoamérica y de África, son las dos grandes corrientes. Pero, también existe la presencia de otras personas que vienen de Europa, pero que vienen en otro sentido, vienen buscando un mejor clima, una vida de calidad y de menor coste que en sus lugares de origen y también una vida mucho más tranquila, serena, sobre todo, para los últimos años de su vida.
Al inicio de la semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, estamos todos invitados a imitar a los Magos, a ir en búsqueda de la estrella, de la luz que es Cristo. «Siempre el ecumenismo se ha distinguido, no por juntarnos los que pertenecemos a distintas Iglesias cristianas – precisó Monseñor Jesús Catalá – cuánto, por acercarnos todos al mismo centro que es Jesucristo. Como los radios de una rueda, si se juntan entre ellos fuera del centro, no están unidos; si se acercan al centro se unen más. Es un poco la idea que a mí me gusta del ecumenismo».
Sobre el proceso sinodal que la Iglesia está desarrollando desde el pasado octubre, el Catalá dijo que: «la sinodalidad es propia de la Iglesia, una característica suya». Asimismo, el prelado recordó cuando lo nombraron obispo, en ese tiempo trabajaba en la Secretaría del Sínodo de los Obispos, hace 25 años y el cardenal secretario le dijo en la despedida: «lo que usted ha aprendido aquí en el Sínodo, procure vivirlo como Obispo».
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