San Francisco de Borja regresa a Valencia 452 años después
La urna con las reliquias del santo jesuita podrán ser veneradas hasta el 4 de noviembre, cuando volverán a Madrid
Las reliquias con los restos mortales de San Francisco de Borja (Gandía, Valencia, 1510- Italia, 1572) llegaron el pasado viernes a la archidiócesis de Valencia, donde permanecerán hasta el 4 de noviembre. Se trata «de un acontecimiento histórico con el fin de promover y acrecentar el conocimiento y la devoción del que fuera IV Duque de Gandía y el Tercer General de la Compañía de Jesús», ha explicado la archidiócesis de Valencia en un comunicado.
El arca de plata que contiene las reliquias partió desde la parroquia de san Francisco de Borja –ubicada en el barrio de Salamanca de Madrid, lugar en el que se encuentra habitualmente– y permanecerá en la parroquia de la que también es titular en Valencia. Además, visitará la ciudad de Gandía (del 13 de septiembre al 1 de octubre) y la localidad de Turís (18, 19 y 20 de octubre).
«Es un acontecimiento histórico. Nuestra archidiócesis, por segunda vez en cuatrocientos cincuenta y dos años, se prepara para recibir los restos óseos de San Francisco de Borja, y todo ello, después de haber vivido un Año Jubilar convocado por la Santa Sede, con motivo del 450 aniversario de su muerte y el 350 aniversario de su canonización», ha asegurado el párroco de la parroquia valenciana, Pedro Miret.
A Gandía, las reliquias llegarán el 13 de septiembre y serán recibidas en el Palacio del Santo Duque por el abad de la colegiata del municipio, Ángel Saneugenio.
La fiesta en honor a san Francisco de Borja este año tendrá lugar el lunes 30 de septiembre en la ciudad de Gandia, por lo que las reliquias del Santo Borja partirán hacía Valencia el 1 de octubre, y en la parroquia de san Francisco de Borja estarán expuestas hasta el lunes 4 de noviembre.
Igualmente, la parroquia San Francisco de Borja de Valencia celebrará la fiesta litúrgica de su santo titular, el domingo 6 de octubre a las 12 horas, en una eucaristía presidida por el arzobispo, monseñor Enrique Benavent, y concelebrada por su párroco, sacerdotes del arciprestazgo y sacerdotes vinculados a la parroquia.