Imagen del exterior de la mina de Súria, donde han muerto tres personas, este jueves
La Iglesia española denuncia la «lacra social» de las muertes por accidente laboral
«Nos unimos a la petición del Papa Francisco y a la de tantos trabajadores: ¡No más muertes en el Trabajo! y esforcémonos en lograrlo», ha señalado la CEE tras el fallecimiento de tres trabajadores en Súria
La Iglesia católica a través de la Conferencia episcopal ha denunciado las 826 muertes en el trabajo que se produjeron a lo largo del pasado año 2022 y ha urgido a abordar esta «lacra social» que se cobra la vida de 2 ó 3 personas diarias. La denuncia se produce tras la noticia del fallecimiento de tres trabajadores este jueves en las minas de Súria (Barcelona).
Según el comunicado, la CEE señala que en lo que llevamos de año «se habrán producido 150 muertes por accidentes laborales» y «pocos medios de tirada nacional se han hecho eco de estas muertes», reclaman los obispos.
Calamidad social
Así, han lamentado las muertes de los tres trabajadores que «han hecho falta para despertar el interés social por esta sangría» que se produce «diariamente» en el mundo laboral.
En este sentido, los obispos instan a afrontar esta «calamidad social» y exigen al Gobierno y a los agentes sociales que prioricen en sus agendas en buscar medidas «eficaces» para abordar el problema. Aunque reconocen que la estrategia española 2023-2027 sobre seguridad y salud en el trabajo ha sido «un gran paso» ven necesario «concretar y desarrollar» cada uno de los objetivos del acuerdo para que sea eficaz y proteja la vida de los trabajadores.
Más que cifras
«La verdadera tragedia es que estas muertes se convierten en frías cifras estadísticas que nos ocultan las tragedias personales y familiares que hay detrás de cada uno de estos accidentes. El Papa Francisco nos recuerda que no son números, son personas. Trabajar en seguridad permite que cada uno exprese lo mejor de sí mismo ganándose el pan de cada día. Cuanto más prestamos atención a la dignidad de la obra, más seguros estamos de que aumentará la calidad y la belleza de las obras creadas», señala la CEE.
Así, han expresado su «profundo pesar» y condolencias a familiares, amigos y compañeros de trabajo de los fallecidos y han aprovechado para recordar que «la situación de la salud laboral urge a los cristianos a comprometerse activamente por un trabajo sin víctimas».
«Nos unimos a la petición del Papa Francisco y a la de tantos trabajadores: ¡No más muertes en el Trabajo! y esforcémonos en lograrlo», ha concluido el comunicado de la Conferencia Episcopal.
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