
Orinar
Un médico explica por qué aguantar el pis puede afectar tu salud y tu memoria
No es recomendable aguantar las ganas de ir al baño de forma recurrente
La retención de la orina es un tema que, aunque se da por sentado en muchas ocasiones, puede tener consecuencias significativas para nuestra salud. En un interesante y revelador vídeo compartido por David Callejo Crespo, médico, profesor y anestesista, se abordan los riesgos de aguantar las ganas de hacer pis, especialmente aquellos inculcados desde la infancia en entornos escolares y laborales.
El impacto de aguantar las ganas
Desde que somos niños, nos enseñan a esperar hasta el recreo para ir al baño. Este hábito puede parecer inocente, pero cuando se convierte en una costumbre, puede ocasionar problemas. Según el doctor Callejo, cuando la vejiga se llena entre un 50 % y un 75 %, comenzamos a sentir la necesidad de orinar. Si se ignoran estas señales frecuentemente, la vejiga puede adaptarse a una mayor capacidad, lo que puede tener efectos adversos en la salud.
Riesgos asociados
Uno de los peligros evidentes del hábito de aguantarse es la infección urinaria. La orina retenida puede servir como un ambiente propicio para el desarrollo de bacterias. A medida que la vejiga se dilata demasiado, puede volverse menos eficiente, dificultando el vaciado. Además, se destaca que la vejiga no solo es un órgano funcional, sino un músculo que puede verse afectado si se le somete a una presión excesiva.
Pero eso no es todo. Un estudio sugiere que aguantar las ganas de orinar puede tener un impacto negativo en nuestra memoria y concentración. El doctor Callejo menciona que, si la vejiga está demasiado llena, nuestro cerebro se distrae, lo que puede afectar nuestro rendimiento en actividades cotidianas y académicas. Por lo tanto, no únicamente se trata de comodidad física, sino de un factor que puede influir en nuestra capacidad cognitiva.
¿Cuándo es demasiado?
Si bien es normal que durante jornadas largas de trabajo o estudio se aguante el pis de forma puntual, no es aconsejable hacerlo frecuentemente. Lo habitual es que se orine cada tres a cuatro horas, aunque esto puede depender de diversos factores como la hidratación y la salud individual. Hacer pis cada hora podría ser indicativo de una vejiga hiperactiva, una condición que también requiere atención médica.