Ericsson y Apple tendrán que llegar a un nuevo acuerdo por el uso de patentes
Lucha de patentes
Ericsson amenaza la venta del iPhone en Europa
Siete años después de firmar la paz, la compañía sueca quiere impedir que Apple venda sus productos por infracción de patentes
En 2015 Ericsson y Apple firmaron la paz. En 2022 ese acuerdo de licencia cruzada de patentes ha expirado y los suecos han vuelto a levantar la espada para librar una nueva batalla legal contra Apple.
El iPhone es una tecnología que genera envidias. Si la sociología ya ha dictado sentencias sobre que su posesión indica un nivel económico alto, su tecnología también es objeto de deseo.
Ericsson decidió hace años emprender acciones legales contra los de Cupertino porque, según su jefe de propiedad intelectual, «los productos de Apple se benefician de la tecnología inventada y patentada por los ingenieros de Ericsson». La parte de la manzana mordida aseguró en otro comunicado que «Siempre hemos estado dispuestos a pagar el precio justo para asegurar los derechos de estándares esenciales de patentes que utilizamos en nuestros productos». Pero nunca se llegó a un acuerdo y todo desembocó en los tribunales.
Del 2G al 5G
El problema viene porque, entre otra tecnología, la del 5G también tiene que rendir cuentas con Ericsson al igual que lo hizo el 2G, 3G y 4G. Los suecos han publicado que se embolsan de Apple 150 millones de euros al año. Una cifra ridícula para una empresa que ha llegado a los tres billones de dólares de capital en 2022. Ahora piden cinco euros por iPhone vendido y Apple se ha negado.
En Estados Unidos, Ericsson quiere llevar el proceso a Texas, un estado que protege las patentes. En Europa la cruzada se ha iniciado en Países Bajos, Alemania y Reino Unido. Además, Brasil es otro de los focos de interés.
Ericsson pide medidas cautelares para que esos países prohíban la venta del iPhone. Van a máximos para obligar a negociar a Apple y aumentar los ingresos por terminal vendido.
El proceso volverá a ser largo. Uno más en los que se ve implicado Apple en su ya complicada existencia. En algunos casos su posición de dominio es difícil de entender por la UE, mientras que en otros la compañía norteamericana se hace fuerte en sus innovaciones.
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