La alcaldesa Inés Rey y el edil José Manuel Lage, antes de iniciarse la sesión plenaria de este jueves
Revés al Gobierno socialista de La Coruña al ver tumbada su propuesta de municipalizar un polígono
El interventor alerta de que no existe una valoración de «la repercusión económica» de la recepción «para los presupuestos» del Ayuntamiento
El Gobierno local de La Coruña, presidido por la socialista Inés Rey, se llevó un duro varapalo en la última sesión plenaria celebrada este pasado jueves. La propuesta que pretendía aprobar para que el Ayuntamiento asumiese parte de unas obras de urbanización del polígono de Pocomaco, como paso previo para conseguir la titularidad de sus calles (ahora de gestión privada), no salió adelante después de que el PP votase en contra y de que el BNG, que es la formación que facilitó la investidura de los socialistas en 2023, se abstuviese. Esta situación derivó en que el número de noes (12) fuese mayor al de síes (11), con lo que este asunto se quedó en el tintero.
El concejal popular Antonio Deus afirmó que la «tramitación del convenio fue impresentable, precipitada, sin consenso y sin amplio respaldo de los comuneros» del polígono e hizo referencia a las dudas manifestadas en el informe que elaboró el departamento de Intervención sobre la propuesta presentada por los socialistas.
El BNG explicó que se abstuvo en la votación se escudó al no entender el motivo de que el Ayuntamiento tenga que «financiar a la comunidad de propietarios a través de una subvención nominativa al 50 % de una obra que es su obligación» y al tener «dudas» con la documentación que se aporta al no estar claro el presupuesto, según indicó la concejal nacionalista Avia Veira.
Críticas por el bloqueo
Al conocerse las intenciones de voto por parte del PP y del BNG, el portavoz del Gobierno municipal, José Manuel Lage, centró sus acusaciones en los populares, a pesar de que la propuesta hubiese salido adelante si los nacionalistas la respaldasen. «Serán responsables de no tramitar el convenio. Están bloqueando el funcionamiento y siendo responsables de lo que va a pasar. El Gobierno cumple», aseguró.
Previamente, en la presentación del asunto al pleno, había explicado que «estamos delante de un trámite necesario para completar una acción que no se ha acometido en los 50 años anteriores», ya que el parque empresarial de creó de forma totalmente privada.
Sin valoración económica
El documento al que aludió el PP fue elaborado por el interventor municipal y advierte de que en el expediente tramitado «no hay documento ninguno» en el que se «valore la repercusión económica de la recepción de la urbanización para los presupuestos presentes y futuros del Ayuntamiento». «El convenio solo aclara expresamente, como mayor gasto a asumir, que una vez recepcionado los viales y demás infraestructuras asumirá la suministración de la red de iluminación y la presentación del servicio de abastecimiento, saneamiento y depuración de aguas residuales, pero no aclara si el Ayuntamiento asume también el servicio de pavimentación de vías urbanas», recoge el informe.
Otra advertencia que realiza el interventor municipal es que «tampoco consta en el expediente remitido ningún informe de un ingeniero municipal» sobre el «estado de la urbanización y si con las obras comprometidas a ejecutar y financiar por la asociación de propietarios del polígono las infraestructuras que va a recibir el Ayuntamiento estarán en condiciones óptimas para su recepción» sin obligación para el Ayuntamiento «de tener que asumir nuevas inversiones de reposición para el correcto funcionamiento y estado de dichas infraestructuras».
Sin acuerdo para las obras
La propuesta que el Ejecutivo local coruñés intentó aprobar en la sesión plenaria era una modificación del convenio firmado a principios de este año con la comunidad de propietarios de Pocomaco. La documentación presentada indica que «tras diversos mensajes electrónicos», esta entidad «tiene manifestado que no sometería a la asamblea general» del parque empresarial la aprobación del acuerdo con el Ayuntamiento mientras no fuese aportado el cambio del convenio, en el que se estableciese cómo se va a regularizar «el sistema de rejillas salvacunetas» para su efectiva integración en el sistema viario.
El acuerdo entre ambas partes fija que las empresas del polígono deben asumir el coste de construir los nuevos itinerarios peatonales (75.000 euros) y la mejora de la iluminación (1,5 millones).También establece que deben aportar el 50 % del precio de la actuación de las rejillas (1,9 millones) y que la otra mitad la asumirá el Ayuntamiento a través de una subvención que concederá para tal fin.
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