Fachada del Ayuntamiento de Medina del Campo
Medina del Campo se convierte en laboratorio electoral para medir la distancia entre PP y Vox
La formación verde rompió con el PP tras denunciar una sucesión de «desplantes políticos e institucionales»
La ruptura del pacto de gobierno entre el Partido Popular y Vox en el Ayuntamiento de Medina del Campo (Valladolid) se ha convertido en un termómetro electoral de cara a las próximas elecciones de Castilla y León, donde ambos partidos compiten desde posiciones separadas tras el fin de su coalición autonómica en julio de 2024. El fin del acuerdo en Medina se suma a otras fracturas recientes entre PP y Vox, como la de Burgos (hace menos de un año), y deja ya pocos ayuntamientos en los que ambas formaciones gobiernan en coalición, entre ellos Valladolid capital o El Burgo de Osma (Soria).
La crisis de Medina del Campo estalló el martes, cuando Vox oficializó su salida del equipo de gobierno mediante un comunicado en el que denunciaba «una sucesión de desplantes institucionales, una absoluta falta de transparencia y una inacción en materia de seguridad ciudadana».
La formación liderada por Atenea Santana acusó al alcalde, Guzmán Gómez Alonso (PP), de «tergiversar el voto de Vox en el pleno sobre la tasa de basuras» y de «negar información» sobre la criminalidad del municipio y actuaciones policiales. «Se han sobrepasado ciertos límites», sostuvo Santana, que abandona el Ejecutivo local y pasa a la oposición.
Desde la dirección provincial, David Hierro, coordinador de Vox Valladolid, respaldó la decisión de sus compañeros de partido y la calificó de «coherente». Según la formación, la ruptura es consecuencia de meses de desatención y de una política municipal alejada de los compromisos adquiridos con los votantes de Vox.
El alcalde de Medina del Campo, Guzmán Gómez, respondió con firmeza a la decisión de Vox, que calificó de «una irresponsabilidad absoluta». Además, negó cualquier falta de transparencia: «No nos han requerido ningún informe de criminalidad», dijo el alcalde en la Cadena Cope, quien recordó que la seguridad ciudadana es competencia de la Policía Nacional.
En esa misma entrevista, Gómez atribuyó el conflicto a una maniobra preelectoral del partido de Abascal: «Como se acercan las elecciones, así han dado la orden de generar problemas. No hay otra explicación. Aquí el gobierno sigue estable y tranquilo», señaló el regidor, que aseguró contar con el apoyo del resto del equipo municipal.
El consejero de Movilidad y Transformación Digital, José Luis Sanz Merino, con el alcalde de Medina del Campo, Guzmán Gómez Alonso, en una imagen de archivo
A partir de ahora, el PP de Medina del Campo pasa a depender exclusivamente de la formación Medina Primero y de su propio grupo para superar vetos en el Pleno. En este contexto, el escenario se bifurca entre dos alternativas: o un gobierno en minoría con acuerdos puntuales o la apertura de negociaciones para incluir nuevos apoyos.
«Son cosas que no entendemos»
Otra de las voces que valoró la ruptura de Vox y PP en Medina fue el presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, que destacó la «generosidad» del alcalde de Medina del Campo con Vox. «Son cosas que no entendemos», dijo.
Además, recordó que a Vox se le ofreció el área de migración de la localidad, un tema que «ocupa y preocupa a Medina del Campo en este momento en el que estamos».
Mientras, desde el PSOE descartan que lo ocurrido en Medina pueda ocurrir en Valladolid. «No tiene pinta» , dijo el portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Valladolid, Pedro Herrero, que cree que la formación de derechas «entregada» a los 'populares'.