Óscar Puente, ministro de Transportes y Movilidad SostenibleEuropa Press

Puente asegura que «no se perderá ni un empleo» en el taller de Renfe en Miranda y los trabajadores denuncian un desmantelamiento

El ministro de Transportes ha anunciado una inversión de cinco millones de euros destinada a renovar focos, techos y medios productivos, así como a modernizar las instalaciones de Renfe en Miranda de Ebro (Burgos)

El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, aseguró este martes en el Senado que la Base de Mantenimiento de Miranda de Ebro (Burgos) «no se va a cerrar», pese a la reordenación interna que supone clausurar el Taller de Remolcado de Renfe y concentrar toda la actividad en el área de Autopropulsado. Precisamente, miles de personas salieron a la calle la semana pasada en Miranda para denunciar la decisión del ministro, que a su entener, es un «desmantelamiento» progresivo de la instalación.

Puente respondió así a una pregunta de la senadora del PP Raquel González, que acusó al ministro de «mentir» y de tener la «intención real» de cerrar las instalaciones «de forma directa o indirecta».

El titular de Transportes defendió que la apuesta del Ministerio pasa por reforzar el taller de autopropulsado porque «Renfe y el tren en España se nutren fundamentalmente de material autopropulsado», mientras que el remolcado, recordó, «solo se dedica a mercancías».

Según explicó, esa reorganización permitirá «más carga de trabajo» y garantizará que «no se va a perder ni un solo puesto». Para apuntalar su argumento, anunció una inversión de cinco millones de euros destinada a renovar focos, techos y medios productivos, así como a modernizar las instalaciones. «El taller no solo no se va a cerrar, sino que se va a potenciar», afirmó, antes de acusar al PP de «alarmar innecesariamente» a la población mirandesa.

Desmantelamiento progresivo

Las palabras del ministro contrastan con el malestar de la plantilla, que desde noviembre protesta por la decisión de Renfe de cerrar el taller de material remolcado y reubicar a sus trabajadores en otros destinos.

Los sindicatos consideran que la operación supone el desmantelamiento progresivo de una instalación histórica y alertan del impacto sobre el empleo directo y las empresas auxiliares que trabajan en el recinto ferroviario.

El debate político llega en pleno calendario de movilizaciones y con la alcaldesa de Miranda de Ebro, Aitana Hernando, reclamando información precisa sobre el futuro de los puestos de trabajo.