Robert Sánchez y Marc Cucurella con la bandera de España
Redes sociales
El jefe de la oficina de Puigdemont patina: dice que Cucurella no es catalán por lucir la bandera de España
Alay lamenta que el jugador de Alella exhibiese la bandera española, y varios usuarios le dejan en evidencia
La imagen de Marc Cucurella con la bandera de España atada a la cintura durante la celebración de su victoria en el Mundial de Clubes con el Chelsea ha sido muy celebrada. El lateral izquierdo, nacido en Alella (Barcelona), ha sido uno de los titulares indiscutibles del combinado británico durante los siete partidos de esta competición de nuevo cuño.
Cucurella puso el broche a una final fantástica, en la que se mantuvo «incombustible» en la banda izquierda –según celebran los compañeros de la sección de Deportes–, sacando la bandera nacional y luciéndola con orgullo mientras saludaba al presidente de los EEUU, Donald Trump, y se alegraba con sus compañeros. «Cucurella con la bandera española. En mi equipo», celebraba un internauta en X.
Sin embargo, no todas las reacciones en redes sociales han sido tan positivas. Entre los comentarios más cargados de bilis que ha provocado la improvisada falda de Cucurella destaca el de Josep Lluís Alay, jefe de la oficina del expresidente catalán y líder de Junts, Carles Puigdemont, que es –como su jefe– un usuario asiduo de X para comentar todo tipo de noticias.
En referencia a una fotografía de Cucurella con la bandera de España, Alay cuestionaba que el futbolista fuera auténticamente catalán, dando a entender que no se puede haber nacido en Cataluña y sentirse a la vez español. «Futbolistas del Chelsea exhibiéndose con la bandera española en la Copa del Mundo en los EEUU… Me pensaba que había un catalán, pero veo que no», escribe.
Más allá del error futbolístico –el torneo jugado no era la Copa del Mundo, sino el Mundial de Clubes–, el mensaje de Alay deja entrever lo sectario de los postulados nacionalistas. Una estrechez de miras que varios usuarios de la red social ya se han ocupado de explicitarle, con mensajes como «es que los catalanes, y usted es un buen ejemplo, son españoles» o «catalán y español como un buen hombre, no como usted que va señalando a la gente a través de una pantalla».
