Edificio histórico, situado en el número 71 de la Rambla del Poblenou, con un medallón de la imagen de Hermes, el dios del comercio.Albert Esteves, 2019

El edificio histórico de Poblenou que guarda un vínculo con la mitología griega

Una fachada única con Hermes, el dios del comercio, como protagonista de la prosperidad barcelonesa

En el número 71 de la Rambla del Poblenou se erige un edificio que, con 130 años de historia, refleja la arquitectura ecléctica del final del siglo XIX. Construido en 1895, su fachada combina detalles clásicos y modernistas, destacando por un medallón con la imagen de Hermes, el dios griego del comercio y los viajeros, que adorna su coronamiento. Este edificio, de dos plantas, no solo es testimonio del auge comercial e industrial de la época, sino que también enciende la curiosidad por su simbolismo.

El diseño del inmueble, enmarcado por tres ejes verticales de aberturas, cuenta con balcones ornamentados con motivos florales y pilastras corintias. Sin embargo, lo que realmente capta la atención es su frontón semicircular, en el que Hermes se muestra como un símbolo de progreso y prosperidad. La elección de este dios no es casual: en una Barcelona pujante, representaba el florecimiento del comercio, que en esos años era una parte clave de la ciudad.

Aunque la planta baja ha sido modificada en varias ocasiones, el edificio conserva elementos originales, como las barandillas de forja y las losas de los balcones. Su restauración ha dejado intactos muchos de los detalles que permiten imaginar cómo era la ciudad en tiempos pasados, mientras Hermes sigue vigilante, recordando una época de crecimiento económico y cultural.