Un usuario de la Tarjeta ‘Xente Nova’ en Galicia
La Xunta confirma la prórroga del transporte gratuito: estos son los gallegos que seguirán viajando sin coste
El transporte público gratuito en Galicia seguirá vigente hasta 2026
La movilidad gratuita en el transporte público gallego seguirá vigente durante dos años más. El Diario Oficial de Galicia (DOG) acaba de publicar la prórroga de dos de las bonificaciones más utilizadas por la ciudadanía: la tarjeta Xente Nova, dirigida a menores de 21 años, y la tarifa +65, que permite viajar sin coste a los mayores de esa edad.
Ambas medidas, que han impulsado un uso récord del autobús interurbano y de otros servicios dependientes de la Xunta, permanecerán activas hasta el 31 de diciembre de 2026.
Con esta ampliación, el Gobierno gallego consolida un programa que se ha convertido en un pilar para fomentar la movilidad sostenible y aliviar el gasto de miles de familias. Solo entre enero y septiembre de este año, jóvenes y mayores realizaron 7,7 millones de desplazamientos gratuitos, una cifra que confirma la elevada acogida de estas bonificaciones.
Cómo funcionan estar tarjetas
La bonificación cubre hasta 60 desplazamientos mensuales y se aplica tanto al autobús interurbano como al transporte marítimo metropolitano y a los servicios ferroviarios de la comarca de Ferrol.
El sistema es sencillo, el usuario adelanta el importe de los viajes y la Xunta devuelve automáticamente el coste en la propia tarjeta. El reintegro funciona de forma automática, los usuarios solo tienen que introducir su tarjeta TMG en cualquier cajero de Abanca a partir del mes siguiente para recibir la devolución.
El coste de estas bonificaciones ascendió a 8,7 millones de euros para los usuarios jóvenes y a 4,4 millones para los mayores, una inversión conjunta que ha permitido que miles de gallegos se desplacen sin impacto en su economía.
Desde su creación en 2016, Xente Nova acumula más de 33,5 millones de viajes gratis, mientras que la tarifa +65 roza los 6 millones desde su puesta en marcha en 2024.
La Xunta defiende que estas medidas, además de mejorar la accesibilidad, contribuyen a una movilidad más sostenible y a modernizar el sistema de transporte público, convirtiéndolo en una alternativa real y económica para toda la ciudadanía.