Uno de los mejores atardeceres de Galicia se vive en La Coruña
El mejor atardecer de Galicia se vive desde esta ventana al mar en La Coruña
La estructura recuerda la forma de un antiguo dolmen
En Galicia, los miradores juegan un papel fundamental a la hora de descubrir el patrimonio natural de la comunidad. Desde las alturas de los acantilados de la Costa de la Muerte hasta las vistas panorámicas sobre las rías y bosques, la comunidad gallega cuenta con múltiples puntos desde donde contemplar su entorno natural.
Desde el Mirador de Ézaro, que domina la espectacular caída del río Xallas hasta el Mirador de Monte Faro en Ferrol, que ofrece vistas panorámicas sobre la ría y la costa, pasando por el Mirador de Monte Pindo, con sus amplias panorámicas sobre el océano Atlántico, la comunidad dispone de numerosos espacios ideales para conectar con la naturaleza. En La Coruña hay uno que destaca por ofrecer uno de los mejores atardeceres de Galicia.
Una ventana al Atlántico muy particular
Se trata de Fiestra aberta ó Mar (ventana abierta al mar) o lo que es lo mismo Ventana al Atlántico, que es con el nombre con el que se popularizó este mirador. Situado en el paseo marítimo de O Portiño, una pequeña zona costera al oeste de La Coruña, muy cerca de la ciudad pero alejada del ruido urbano, porque es un monumento que invita a la contemplación.
Es una escultura de granito diseñada por el escultor gallego, Francisco Pazos. La estructura recuerda la forma de un antiguo dolmen con dos grandes hojas que forman una ventana abierta hacia el océano Atlántico.
Cada tarde, esta ventana tan especial se convierte en uno de los mejores lugares para presenciar el ocaso en Galicia. Los colores del cielo van evolucionando, pasando por tonos anaranjados, violetas y dorados, que contrastan con el azul del océano. Una estampa visual que atrae a fotógrafos, turistas y locales que buscan vivir un momento de calma y belleza natural.
Por la noche, la escultura es iluminada con una luz y la transforma en una especie de faro simbólico del litoral coruñés; una iluminación que añadió un nuevo atractivo a la zona después del ocaso.
Atardecer en la Ventana al Atlántico
Además, el enclave está perfectamente acondicionado para el acceso público ya que cuenta con senderos naturales, áreas para sentarse y disfrutar del paisaje, y un amplio aparcamiento con facilidades para personas con movilidad reducida.
Otro aspecto a tener en cuenta es la baja contaminación lumínica de la zona, lo que favorece la observación astronómica.
La Ventana al Atlántico de La Coruña es el lugar perfecto para quienes buscan disfrutar de uno de los mejores atardeceres de Galicia, por lo que, este rincón de la costa coruñesa, se presenta como una parada imprescindible este verano.