Así se encuentra el barrio de la Fuensanta
El barrio de Córdoba que convive a diario con la inseguridad y el abandono
Recogen firmas denunciando «el vandalismo, actos incívicos y atemorización de los vecinos»
La situación que se vive en el barrio de la Fuensanta de Córdoba se degrada por momentos. En febrero pasado aprobó por unanimidad el Pleno del Ayuntamiento un paquete de 13 medidas de las que aún no se sabe nada y los vecinos claman por su urgencia a todas las administraciones, porque cada una de ellas, señalan, tiene responsabilidades directas en el amplio repertorio de reivindicaciones.
Así lo explica el presidente de la asociación de vecinos La Paz y Santa Victoria, Rafael Pedrajas, quien complementa la gravedad de la situación con datos concretos y aun así se muestra esperanzado, ya que afirma que «la situación es compleja pero es reconducible» con la intervención institucional.
En términos generales, Pedrajas parte de una situación de abandono que ha ido degenerando con el paso del tiempo tanto en la conservación del barrio y de sus infraestructuras como en la convivencia, con problemas incluso de orden público.
Hace semanas ardía un coche en la calle Núñez de Balboa junto a Hermanos Pinzones, y en la madrugada de este miércoles han ardido cuatro contenedores en la calle Compositor Serrano Lucena, afectando a vehículos aparcados en las inmediaciones. Estos actos vandálicos se han repetido con una quema de contenedores al día siguiente, en la madrugada del jueves al viernes, en la avenida Virgen Milagrosa, calcinando contenedores y árboles.
Vehículo ardido esta semana en la calle Hermanos Pinzones
Recogida de firmas
En la madrugada de ayer viernes, alrededor de las 04:00, volvieron las llamas a la avenida Virgen Milagrosa. No son hechos esporádicos sino que se suman a un estado que ha llevado a la recogida de 480 firmas de vecinos «denunciando actos de vandalismo, comportamientos incívicos y atemorización de vecinos», explica.
Contenedores ardiendo en la avenida Virgen Milagrosa, esta semana
La reivindicación principal es la de una atención integral de las administraciones, porque Pedrajas señala que requieren una mayor atención de la Policía Nacional y de la Policía Local, pero también de Servicios Sociales, Infraestructuras, Sadeco, Educación o Mayores, entre otros.
En concreto, en el pliego de firmas se detallan cuestiones concretas que pasan desapercibidas para el resto de la ciudad, pero que en la Fuensanta son moneda común. Entre ellas están «las molestias y ruidos de la apertura de la piscina de la Fuensanta de madrugada, así como el impacto insoportable de noche de focos, gritos y voces por el uso del campo de Fútbol 7 del Imdeco, construido a escasos metros de las viviendas, que de noche molestan e impiden hacer una vida normal y conciliar la vida familiar y que se agrava especialmente en verano».
Botellón en la plaza de la Juventud
La cosa no queda ahí. También en las noches de verano se produce lo que califican como «un auténtico problema» que no es otro que «la plaza de la Juventud se utiliza como punto de encuentro, de madrugada, para consumo de alcohol, formando escándalo público, impidiendo dormir a las familias que viven en las inmediaciones de esa plaza».
Por si fuera poco, tras la pasada Semana Santa aparecieron unas pintadas ofensivas en varios portales de viviendas de la calle Hernando de Magallanes, «en distintos días y de forma reincidente, intimidando y atemorizando a estos vecinos, que tienen todo el apoyo del barrio de la Fuensanta».
Pintadas aparecidas en la calle Hernando de Magallanes
Los vecinos se han reunido con la finalidad de crear una comisión de seguimiento de los casos de inseguridad que se dan en el barrio. Pedrajas explica que «como hemos recogido las firmas vamos a analizar todas y cada una de esas circunstancias que se producen en el barrio» a cualquier escala.
Excrementos caninos
Los incendios, las amenazas o el destrozo de elementos se combinas con otras acciones de menor impacto que también degradan la calidad de vida en la Fuensanta. El presidente de la asociación de vecinos detalla la batalla que libran contra los excrementos caninos, que son una constante siempre presente en sus calles. Han elaborado un plano del barrio en que se detallan los comportamientos incívicos que se producen en cada zona. Reclaman «que se pase a sancionar porque quien paga el pato es el resto de la población y hay unas normas que hay que cumplir». La solución que proponen es un parque canino en el Paseo Valerio Molina.
Pedrajas recuerda que desde la asociación hicieron unos carteles, pero duraron poco porque eran de papel sujeto con fixo. Ahora piden a Sadeco que les proporcione otros realizados en un material más duradero y que ellos se encargarán de su colocación tanto en los portales de las viviendas como en la vía pública.
Los centros de acogida
Otro punto débil de este barrio de la Fuensanta es el las casas de acogida. La del Ayuntamiento en Campo Madre de Dios, la de Cáritas y el centro Juan de Mairena de la Junta de Andalucía se concentran en sus calles y los vecinos entienden que ya han demostrado con creces su solidaridad con el resto de la ciudad.
Presencia de 'sinhogarismo' en las calles de la Fuensanta
Esta situación genera «escándalo público», como denuncia Pedrajas, quien señala que hay zonas «muy peligrosas», como la calle Pantoja, a la entrada del barrio. Quienes no encuentran plaza en un centro de acogida se quedan a pasar la noche en la calle, con todo lo que esto conlleva. El incendio de esta semana en la calle Compositor Serrano Lucena se produjo «a 15 metros de un asentamiento de gente durmiendo».
El colegio Lucano
Por esta razón se opusieron recientemente a que el Ayuntamiento convirtiera en un centro parecido el antiguo colegio Lucano. «No entendemos la obsesión de utilizar espacios en el barrio de la Fuensanta porque los que hay ya generan un problema», detalla el presidente de la asociación de vecinos, quien, por contra, recuerda que «no tenemos residencia de mayores ni centro de día», que era la utilidad que pidieron que se le diera al Lucano.
Sobre este antiguo centro educativo, reivindican «que se use ya la zona deportiva», como se anunció desde el gobierno municipal, y que el edificio se destine a un uso docente, para los ciclos formativos del Galileo Galilei, o como centro de participación activa para los mayores del barrio.
Con la finalidad de mejorar la convivencia en el barrio, Pedrajas califica de necesidad la recuperación de las reuniones periódicas que había de los vecinos con representantes de la Policía Nacional y de la Policía Local en las que se intercambiaba información de primera mano y servia como cauce de conexión con los cuerpos y fuerzas de seguridad.
Pero en el barrio de la Fuensanta no todo es negativo. Desde la asociación de vecinos aplauden la reciente aprobación de un convenio para poner fin al problema generado por los espacios privados de uso público y por los anuncios de obras en la zona. Pedrajas agradece al delegado de Infraestructuras, Miguel Ruiz Madruga, que haya anunciado la ejecución este año del arreglo de la avenida Virgen Milagrosa, cuyo acerado «está reventado por las raíces de los árboles, algo general en todo el barrio».
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