opiniónFernando López

Madurez musical

Actualizada 05:00

En el mundo cofrade, porque es en muchas ocasiones un submundo aparte, la tendencia es hablar y escribir resaltando lo positivo, al menos de cara a la galería. La crítica está mal vista e incluso salen contrincantes dispuestos a rebatir todos los argumentos posibles. Esa corriente ha tenido cosas positivas, entre ellas la apuesta en valor por la música de la ciudad. No hace mucho, las bandas de la capital debían buscar hueco en la provincia y en otras capitales, donde eran aclamadas, mientras que en sus hermandades recibían de forma constante la negativa.
En plena vigencia, dos bandas de música, tres agrupaciones musicales y tres bandas de cornetas y tambores en plena madurez, con el proyecto de la Fuensanta renaciendo de nuevo. Nueve bandas de la capital y alguna otra de la provincia que se puede considerar casi de la ciudad como es el caso de Tubamirum, que descargan toda su energía y su música en la Semana Santa cordobesa. Un buen termómetro es ver cómo las hermandades y pro hermandades de vísperas acuden a lo propio y no a lo ajeno para hacer crecer su historia.
Cada una con su estilo, alguno más personal y único que otras, han alcanzado la plena madurez. Incluso son profetas en su tierra. Quien se lo iba a decir a los músicos de los noventa y los ochenta. Y sin embargo, el techo parece que aún está lejos y que se puede decir aún más, musicalmente hablando, en la Córdoba cofrade.
La banda de la Esperanza dejó hace tiempo de ser una banda de Semana Santa para ser una referencia musical, polifacética y siempre brillante en cada actuación. La de la Estrella, con un nuevo disco bajo el brazo ha ganado presencia un día más tras la Virgen de la Alegría de la hermandad del Resucitado tras ser la banda que hizo historia en la hermandad de la Soledad, logrando dos días más en cuestión de un lustro.
En agrupaciones musicales, describir la elegancia de la Redención o el sello personal de Cristo de Gracia es casi una pérdida de tiempo dado que es algo inherente a la actualidad. Ambas bandas salen a otras provincias, pero lo hacen para no hacer olvidar al exterior lo bueno que hay en Córdoba. Cristo de Gracia suena desde este año también con la hermandad de la O en una clara apuesta de la cofradía de Fátima por lo local y Conversión recuperó a Redención para la jornada del Viernes Santo en una oportunidad única.
Y en Cornetas la madurez es total con bandas al servicio de las cofradías incluso. La muestra más clara es la de Coronación de Espinas, respetando y esperando hasta el último momento la decisión de la Caridad. Cada una con su estilo, aplicando cambios minuciosos para adaptar el repertorio al estilo de la cofradías. La Salud ha marcado un hito con su presencia en Sevilla junto a la hermandad de San Pablo y Caído y Fuensanta es todo un clásico en la mañana del Domingo de Ramos, con la Misericordia, en San Cayetano o con el Descendimiento.
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