Patio interior del Espacio Serrería Belga
El Espacio Serrería Belga: un centro expositivo con Madrid como protagonista
Un edificio industrial rehabilitado es un nuevo punto de encuentro para la cultura, centrado en la historia de la capital
El Espacio Cultural Serrería Belga es un nuevo punto de interés en la Estación del Arte, a medio camino entre el CaixaForum y el Museo Reina Sofía, concebido para ofrecer proyectos con espíritu innovador. Este centro expositivo quiere dar mayor visibilidad a la colección artística del Ayuntamiento, aunque también anuncia su interés en establecer convenios de préstamo con otras instituciones. En sus instalaciones tiene espacio para la música, el arte, la literatura y, también, la «gastrocultura».
En el barrio de las letras
Gracias al estudio realizado por el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM) podemos conocer el pasado de su edificio, que aporta un carácter muy personal al Espacio Serrería Belga. La historia de este complejo tiene su origen en el siglo XIX.
Como consecuencia a las desamortizaciones de Mendizábal, el solar fue comprado por D. Adrián Benito Burneau, miembro de una sociedad maderera constituida en 1840 con sede en Bruselas y una agencia en Madrid. Tan solo once años después se estableció el ferrocarril en Madrid y con él la Estación de Atocha.
El edificio de Serrería Belga, que permanece gracias a las últimas restauraciones, fue construido en la década de 1920 por el arquitecto Manuel Álvarez Naya. En su época destacó por ser una de las primeras arquitecturas de la ciudad construidas con hormigón armado visto.
Su carácter personal se debe a que tiene una fachada con reminiscencia a la arquitectura clásica, combinada con el aspecto industrial de su interior, que fue utilizado como almacén de madera. Su principal inspiración fue el monumentalismo norteamericano que estaba en su momento álgido en esos mismos años.
Tras la Guerra Civil, a medida que el barrio se volvía más residencial, la compañía fue modificando algunas partes del complejo para darles otros usos. El Ayuntamiento de Madrid, reconociendo su valor patrimonial, adquirió el inmueble para inaugurarlo en 2008, como MediaLab Prado. Este es uno de los complejos arquitectónicos que ha contribuido al reconocimiento de esta zona, el Paisaje de la Luz, como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2021.
Fachada de la calle Alameda
Historia y misterio de una colección
Su primera exposición temporal, Historia y misterio de una colección MAC, ha sido posible gracias al préstamo de una selección de las obras maestras del Museo de Arte Contemporáneo de Madrid, emplazado en el interior del Centro Cultural Conde Duque. El recorrido presenta Madrid como paisaje y su evolución desde principios del siglo XX.
Algunos ejemplos de lo que se puede encontrar en la muestra son: los artistas de la Escuela de Vallecas, cuya mayor inspiración fue la observación del paisaje, los Realistas de Madrid a través de Amalia Avia o Isabel Quintanilla, cuyos lienzos que nos trasladan a sus ambientes de forma íntima, y el fotomontaje de Ouka Lele de una fuente de Cibeles «caleidoscópica. A su vez nos muestran una parte de nuestra cultura visual desde 1927 hasta la actualidad.
La arquitectura urbana y los ciudadanos
Serrería Belga es un proyecto concebido como reflejo de la historia de su emplazamiento. El espacio fue inaugurado después del traslado de la propuesta anterior, Medialab Prado, a Matadero en diciembre de 2022. En su interior, junto a la exposición de las obras maestras del MAC se puede conocer el trabajo de José Luis Carles, Paisajes sonoros de Madrid, un libro de artista acompañado de una grabación que recoge sonidos captados en la Plaza Mayor de Madrid.
Carles, inspirado por unas líneas que Ramón Gómez de la Serna dedicó a esta plaza reflexiona acerca del carácter envolvente de su arquitectura, en consecuencia su aislamiento nos traslada a través del tiempo, haciendo que pasado y presente se entremezclen.
El Espacio Serrería Belga accede a la memoria de la ciudad de Madrid y nos invita a conocerla en cada esquina de su sede. La exposición y sus obras aquí descritas se pueden visitar hasta el 26 de marzo.
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