Imagen de la prisión madrileña de Alcalá Meco
Un sicario se escapa de Alcalá Meco mezclado entre los familiares que le visitaron en Navidad
El fugado se llama Yusef al que apodan 'Pastilla', un joven ceutí de 20 años que confesó el asesinato del jefe de una de las facciones del crimen organizado en la ciudad autónoma
Un joven sicario se escapó el sábado por la tarde de la prisión Alcalá Meco aprovechando que unos familiares le visitaron con motivo de la Navidad.
El chico de 20 años, preso en el centro penitenciario Madrid II, pudo fugarse gracias al despiste del personal del centro que no detectó que entre las personas que abandonaron la cárcel se encontraba el sicario.
El fugado se llama Yusef M. L., al que apodan 'Pastilla', un joven ceutí de 20 años, quien confesó el asesinato en abril en Cádiz de Nayim K. A., alias 'Tayena', jefe de una de las facciones del crimen organizado en la ciudad autónoma. También está acusado del crimen de un hombre de 26 años al que la banda confundió con un miembro de un grupo rival.
La Policía Nacional detuvo a Yuseff a finales de mayo en el puerto de Algeciras y fue encarcelado provisionalmente en la cárcel de esta ciudad gaditana. Fue catalogado con nivel cinco en el Fichero de Internos de Especial Seguimiento (FIES) de Instituciones Penitenciarias.
Debido a su conflictividad con un grupo de internos de esa prisión fue trasladado a Alcalá Meco a principios de este mes de diciembre. El sábado por la tarde se escapó «justo después de unas comunicaciones con familiares», ha adelantado hoy el periódico 'El Faro de Ceuta'. Es decir, presuntamente logró saltarse los controles de seguridad y mezclarse entre dichos familiares para huir sin violencia ni intimidación.
Fuentes de Instituciones Penitenciarias han explicado a Europa Press que la misma tarde del día 23 detectaron la ausencia de este interno, por lo que activaron los protocolos consistentes en comunicar lo sucedido a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, al Juzgado que lleva la causa del preso y han iniciado un procedimiento interno para averiguar qué falló.
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