Dos inmigrantes caminan en las inmediaciones del centro de Alcalá de Henares
Alcalá de Henares en pie de guerra ante la ampliación del centro de inmigrantes sin que el Gobierno asuma costes
El municipio ha pasado de acoger 200 personas a 10.000 desde que el Ejecutivo de Sánchez decidió abrir este espacio
Alcalá de Henares vive una situación de tensión desde que el Gobierno de Pedro Sánchez decidiera que cientos de inmigrantes fuesen al Centro de Acogida, Emergencia y Derivación. Además, a finales de junio se produjo una violación cerca de este inmueble. Desde el Ayuntamiento alcalaíno señalan que el Ejecutivo central «ha incumplido todo: prometieron un máximo de 200 personas, y han pasado más de 10.000; dijeron que era temporal, y ahora quieren hacerlo permanente; prometieron un plan de seguridad y otro de integración, y no hay ni rastro de ninguno».
La alcaldesa Judith Piquet ha asegurado que el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, le ha trasladado su intención de «ampliar» el centro de inmigrantes sin que asuma costes de responsabilidad.
En este sentido, ha advertido que «esta noticia no será comunicada formalmente. Lo harán como siempre, por la puerta de atrás, sin transparencia ni diálogo».
«Un día recibiremos una nota informativa que dirá que ya no son 1.700, sino 2.000, o más. Porque como tienen un problema nacional que no saben resolver, lo reparten en cuotas forzosas a costa de nuestra seguridad y nuestra convivencia», ha comentado Piquet.
Este jueves, la alcaldesa de Alcalá de Henares se ha reunido con el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, para tratar el dispositivo de seguridad de las fiestas del municipio.
Migrantes procedentes de Canarias en Madrid
Datos de criminalidad sin contexto
Piquet ha señalado que era «una junta convocada para aprobar el plan específico de seguridad de las Ferias y Fiestas, y que el delegado ha aprovechado para dar un mitin socialista, eludir sus responsabilidades y anunciar lo más grave de todo: que van a ampliar el centro» de inmigrantes.
Piquet ha reprochado que el delegado, en lugar de centrarse en el único punto del orden del día, acudiera a «dar datos de criminalidad sin contexto, atacar a la Comunidad de Madrid y repetir, una vez más, su guion ideológico».
«Ha venido a leernos una nota política, y lo peor, sin saber ni siquiera qué delitos se han cometido en Alcalá por parte de los inmigrantes. Le hemos preguntado, y ha tenido que pedir un papel porque ni sabía leerlo. Y aun así, anuncia que lo van a ampliar», ha remarcado Piquet.
La alcaldesa ha denunciado que, tras 20 meses de funcionamiento del centro, «el Gobierno ha incumplido todo: prometieron un máximo de 200 personas, y han pasado más de 10.000 inmigrantes; dijeron que era temporal, y ahora quieren hacerlo permanente; prometieron un plan de seguridad y otro de integración, y no hay ni rastro de ninguno».
Centro de Acogida, Emergencia y Derivación de Alcalá de Henares
Centro sin medios
«Lo que está haciendo el Gobierno de Pedro Sánchez es inadmisible. Nos imponen un centro sin medios, nos insultan en los medios de comunicación y ahora pretenden ampliarlo sin comunicarlo siquiera. Se lo he dicho en la Junta: si usted no sabe qué delitos se cometen, ¿cómo se atreve a decir que aquí no hay un problema? Y si no lo sabe, ¿cómo se atreve a llamarnos racistas?», afirmó Piquet.
La alcaldesa recordó también las declaraciones públicas del delegado en televisión, en las que afirmó que «los alcalaínos cometen 45 veces más delitos que los inmigrantes del CAED».
«No lo voy a permitir. No voy a permitir que se insulte a nuestros vecinos. Alcalá ha dado un ejemplo de responsabilidad, de civismo y de convivencia. Aquí no hay brigadas vecinales ni caza al diferente. Lo que hay es hartazgo, porque el Gobierno ha abandonado a esta ciudad».
Judith Piquet fue tajante: «Si el delegado es el máximo responsable de la seguridad, que lo demuestre. Y si no puede, que se marche. Y si Pedro Sánchez no es capaz de gestionar el modelo migratorio de España, que también se vaya. Hoy mejor que mañana. Pero lo que no vamos a aceptar es que su fracaso lo paguen las ciudades».
