El problema es que las llamas se acercaron demasiado a núcleos urbanos sin desalojar

Llamaradas

Habla uno de los bomberos: «Es muy fácil quemarse en un incendio así, la ropa arde, se pega a la piel y te abrasas»

El incendio de Tres Cantos se ha cobrado la vida de un vecino a causa de sus quemaduras, un bombero nos explica lo sencillo que es que ocurran cosas así

No son pocos los vecinos que se preguntan cómo es posible que los bomberos y las fuerzas de seguridad permitieran a alguien acercarse lo suficiente a las llamas del incendio de Tres Cantos como para literalmente abrasarse vivo, hay que tener cuenta que el vecino fallecido tenía quemaduras en el 98 % de su cuerpo, cuando a partir del 80 % las lesiones se consideran incompatibles con la vida.

De acuerdo con las explicaciones de Pedro, un bombero de Madrid con el que ha hablado este medio, «es extremadamente fácil quemarse en un incendio de estas características».

Muy sencillo abrasarse

«El problema es que la gente siempre trata de ayudar y se acerca a las llamas con palas, mangueras o cubos de agua para tratar de proteger su casa o un coche y pasa lo que pasa…»

El problema es acercarse a las llamas sin traje ignífugo

Tras años de experiencia con fuegos similares, Pedro nos explica que «no hace falta estar dentro de las llamas para quemarse, basta con acercarse a alguno de los focos en los que nos vamos a encontrar con llamas de 6 y 8 metros, entonces un simple cambio de viento hace que las llamas literalmente te envuelvan, la sensación es abrasadora, la temperatura alcanza los 300 o 400 grados en cuestión de segundos y entonces la ropa literalmente se pone a arder…».

La ropa arde sin tocarte una llama

Los bomberos, vestidos con trajes ignífugos y con ropa interior ignífuga, pueden aguantar minutos en primera línea hasta que comienzan a sufrir los efectos de las llamas, «el tiempo suficiente para alejarse, el problema es que si el vecino fallecido no llevaba ropa ignifuga es una verdadera locura, porque no te das ni cuenta de que te estas literalmente abrasando».

Ni siquiera los bomberos pueden aguantar mucho tiempo junto a las llamas

En el caso de los incendios de pastos, así se inició el de Tres Cantos, Pedro destaca que «son extremadamente rápidos, las llamaradas no son tan altas pero el riesgo es que con una corriente de aire las llamas te rodean y entonces si no vas preparado, te abrasas, la ropa normal directamente se pega a la piel cuando se pone a arder porque tiene composición plástica. Es una pesadilla, por eso es tan importante la labor de la Policía evitando que la gente se acerque a las llamas».