La futura transformación de Plaza Castilla: una plaza más grande, un posible soterramiento y sin juzgados

madrid continúa estudiando la reforma de Plaza Castilla. El alcalde José Luis Martínez-Almeida reconoció hace un mes que «merece darle una vuelta» porque es un espacio que pese a ser «emblemático» de Madrid no tiene a día de hoy «las condiciones que debería tener». Los atascos se han convertido en un clásico. Este enclave se ha convertido en un objeto de polémica habitual por sus aparatosos atascos, el último se formó en octubre y mantuvo parados a los vehículos durante casi dos horas.

El decano del Colegio de Arquitectos de Madrid (COAM), Sigfrido Herráez, respalda la afirmación del alcalde y asegura que, en la actualidad, «es el claro ejemplo de una plaza que ha dejado de serlo, por eso necesita un cambio».

Así, ha sugerido abrir un concurso para la transformación de Plaza de Castilla, similar al que se convocará antes de 2026 para rediseñar Colón. «Tenemos un concurso que acordamos con el Ayuntamiento en Colón, que está en el mismo eje norte-sur en Castellana que Castilla. Ambos puntos deberían recuperar espacio para el peatón», explica el decano.

Herráez señala que el tráfico, la presencia del intercambiador y la acumulación de autobuses y taxis disuaden a los madrileños de utilizar este espacio para actividades de ocio, como pasear o hacer deporte.

No obstante, el arquitecto considera que el concurso debería contar con la colaboración del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Madrid, debido a la necesidad de «excavar túneles o introducir bajo tierra pasos a nivel». Desde Caminos Madrid advierten que, antes de acometer una reforma, es imprescindible elaborar un estudio detallado de viabilidad.

El decano del COAM subraya que Plaza de Castilla es una rotonda que ha quedado «obsoleta» en términos de «funcionalidad». «Está pasando en la mayoría de las rotondas de Madrid que, poco a poco, se están intentando sustituir por pasos a distinto nivel. Las rotondas no están pensadas para la cantidad de coches que circulan hoy en día porque se bloquean y colapsan», sostiene.

En cuanto a la posibilidad de combinar el intenso tráfico con una mayor superficie peatonal, Herráez asegura que «es posible» si se opta por soterrar la circulación, tal como se plantea en la A-5, Castellana y Ventas. «Siempre que se sotierra el tráfico aparecen en la superficie posibilidades», añade.

Desde el Colegio de Ingenieros de Caminos también consideran que una reforma en Plaza de Castilla podría suponer «una renaturalización del espacio en línea con otras actuaciones que se están realizando en la ciudad», en referencia a los soterramientos en marcha.

Asimismo, destacan que, en caso de llevarse a cabo este rediseño, sería necesario mejorar los accesos al transporte público y analizar los flujos de tráfico, tanto en superficie como en el paso inferior. No obstante, defienden que la remodelación ofrecería la oportunidad de ampliar la superficie peatonal y dotar el espacio de una mayor presencia de vegetación.

Adiós a los juzgados

Otro cambio que sufrirá Plaza Castilla serán los juzgados que tras construcción de la Ciudad de la Justicia en Valdebebas, se trasladarán.

En su lugar se construirá el Distrito Administrativo y de Atención al Ciudadano de Madrid, un recurso que centralizará los trámites burocráticos que tengan que hacer los madrileños, y que permitirá ahorrar unos 80 millones de euros en alquileres al Gobierno regional.

Una vez que se abra la Ciudad de la Justicia, los 48.600 metros cuadrados que ocupan los juzgados de la Plaza de Castilla quedarán vacíos y sin uso. Un espacio en un lugar privilegiado que el Gobierno regional quiere aprovechar convirtiéndolo en el Distrito Administrativo.

Además de estos dos grandes espacios, el Distrito Administrativo y de Atención al Ciudadano va a completarse con las Oficinas Centrales y Proyectos Exteriores de Metro, en la avenida de Asturias; la Oficina de la Vivienda, en esta misma vía, y la Fundación Canal, en la calle Mateo Inurria.