Sobre un total de 93 millones de desplazamientos previstos para este verano, la DGT contempla con preocupación el incremento de la siniestralidad y los fallecidos en carretera. De hecho, en lo que va de año llevamos un 32 % más de víctimas mortales que en 2019.
Ante este panorama la DGT no ha escatimado medios, tanto psicológicos como materiales. Los psicológicos llegan de la mano de una campaña publicitaria en la que se mantiene la técnica de impactar a los conductores, en este caso concienciando sobre la peligrosidad de los atropellos y contando con la colaboración de la cantante de OT Amaia Romero y del actor Eduard Fernández.
En lo referente a medios materiales tampoco escatiman. En concreto se ha ampliado en 29 el número de cámaras de control de vigilancia del uso del móvil y del cinturón de seguridad, llegando a un total de 245 unidades.
Pero el operativo de medidas disuasorias es mucho más poderoso que nunca. Está compuesto por más de 1.300 dispositivos de medición de velocidad, drones, helicópteros Pegasus o motos camufladas.
Es lo último de lo último. Se trata de 34 motocicletas sin ningún identificativo pilotadas por la guardias civiles y que pueden identificar infracciones sin ser descubiertos. Además los agentes no llevan distintivos de la Benemérita ni nada similar. Sólo hacen uso del chaleco reglamentario cuando se bajan del vehículo.
La DGT confirma la existencia de 780 dispositivos fijos de velocidad, de los cuales 92 son de tramo, de los que calculan nuestra velocidad media entre un pórtico de entrada y otro de salida. Estos son los más temidos.
En total cuenta con 545 dispositivos móviles. Los hay tanto de trípode fijos como otros de última generación llamados superradares y que apenas se ven por su pequeño tamaño. Además pueden instalarse a bordo de motos y coches camuflados de la Guardia Civil.
A día de hoy la DGT dispone de 12 helicópteros que están dispuestos en diversos lugares de la geografía española. Tiene muchas limitaciones a la hora de medir nuestra velocidad, por ejemplo falta de visibilidad al atardecer o amanecer, o si circulamos por debajo de 80 km/h, pero son inflexibles al captar infracciones en adelantamientos o similares.
245 cámaras de control de uso de móviles y de uso de cinturón. En este caso se ha aumentado el número de dispositivos en 29 unidades. Ahora además han sido adaptadas para que 'salten' si detectan que sujetamos el móvil con la mano.
39 drones con cámara para la regulación del tráfico, contrariamente a lo que dicen por el momento no detectan infracciones de velocidad, pero 23 de ellos tienen capacidad para emitir denuncias.
Es muy difícil conocer el número exacto porque oscila continuamente, pero se habla de unas 700 unidades entre los que se encuentran modelos como Ford Kuga, Toyota Avensis, Alfa Giulia o Seat Exeo.
Se habla de 20 unidades, aunque en la actualidad se desconoce el número. Son casi indetectables y la altura permite a los agentes vigilar con más comodidad y discreción los coches. Disponen de radar de velocidad.
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