Así quedó el camión calcinado con coches híbridos o eléctricos
Seguridad
De los creadores de «horas de atasco para cargar un eléctrico», llega «arde un camión de coches eléctricos»
La psicosis que rodea al coche eléctrico convierte en noticia cualquier circunstancia en la que se ve involucrado uno, como el incendio de un camión de transporte de coches electrificados este fin de semana
La llegada de los coches eléctricos ha abierto un cisma entre los conductores que va a tardar décadas en cerrarse. Hablamos de los defensores del coche eléctrico frente a los haters (odiadores) oficiales de este tipo de vehículos.
Se trata de una realidad que ha llegado impuesta por un marco legal que no ha estado a la altura de lo que suponía la renovación total del parque automovilístico europeo y su sustitución por vehículos eléctricos.
Bruselas no ha dado la talla
Hace ya cinco años que desde Bruselas optaron por la vía de la obligación, prohibiendo la utilización de los vehículos de combustión, lo que lleva implícito la obligación de comprar un eléctrico, con precios superiores a los 40.000 euros y limitaciones como la precaria red de carga o problemas como los peligrosísimos incendios que son capaces de provocar.
Atascos de más de dos horas para cargar un eléctrico en Semana Santa
La situación es como si en la década de los 80 en lugar de vendernos la compra de un televisor en color como un lujo accesible, hubiera llegado a casa un inspector del Gobierno y nos hubiera reventado a martillazos los viejos televisores en blanco y negro. La televisión en color no tiene la culpa, pero el marco legislativo es lamentable, sin más.
A empujones
En este caso, amantes y odiadores de los eléctricos aprovechan cualquier noticia como munición contra los enemigos. En Semana Santa asistimos a cómo el vídeo de decenas de Tesla esperando más de dos horas a la intemperie para repostar se hacía viral y ocupaba informativos.
Ahora cualquier incendio en el que se ve involucrado un coche se achaca a su batería, sin ni siquiera saber si es eléctrico o no.
Un Tesla reducido a su mínima expresión tras un incendio
Las estadísticas dicen claramente que el riesgo de incendio de un coche eléctrico es proporcionalmente ocho veces inferior que un coche de combustible. Frente a este dato los bomberos dicen que cuando arde un coche eléctrico la situación es «incontrolable».
Hace meses que un bombero de la Comunidad de Madrid nos advertía de este riesgo: «dos bocanadas de aire y caes redondo, dos más y estás muerto», en relación al humo que desprenden los coches eléctricos al arder. En este caso el problema es que se incendia de manera espontánea «incluso cuando están aparcados», algo que jamás hace un coche de combustible.
Una góndola en llamas
En este contexto no es extraño que este sábado las redes sociales comentaban cómo un camión tipo góndola cargado de supuestos coches eléctricos ardía en Jumilla, Murcia, en la A-33.
Los propios bomberos confirmaron que no había heridos, pues el camionero logró salir sin problemas, aunque tuvieron que emplearse a fondo y desviar el tráfico por la antigua carretera para hacerse con el fuego.
Miles de litros de agua para apagar un coche eléctrico
Pese a que fueron los propios bomberos lo que hablaron de coches eléctricos, en las imágenes apenas se puede distinguir un par de MG ZS, que no son eléctricos, y un par de Seat que podrían ser híbrido enchufables.
Lo que parece el tapón de la gasolina puede ser también la trampilla que da acceso al punto de carga, aunque los MG eléctricos lo tienen en el morro, así que fueran o no eléctricos más vale que nos acostumbremos a convivir con estos accidentes y ojalá que las autoridades desarrollen un protocolo para evitar problemas mayores. De lo contrario, el día que se incendie un eléctrico en un garaje de un edificio de viviendas la tragedia puede ser irreparable.
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