Protestas de algunos de los conductores afectados

Protestas de algunos de los conductores afectadosX-Sabah

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Conductores marroquíes se plantan ante la DGT: «No pagamos más multas de 500 euros, ganamos 50 euros al día»

La barrera idiomática les hace muy complicado en muchos casos presentarse al examen español de conducir

El intercambio del carnet de conducir con los ciudadanos de Marruecos se ha convertido en una fuente de problemas desde hace años.

Desde el simple carnet de coche hasta los de camión han sido protagonistas de conversaciones mantenidas entre ambos ejecutivos, la última vez el año pasado cuando Pedro Sánchez visitaba oficialmente al rey de Marruecos, Mohammed VI.

Falta criterio

La pasada semana varios colectivos de marroquíes residentes y trabajadores en España llevaron a cabo sendas manifestaciones frente a la DGT de Madrid y frente a la embajada de Marruecos en España para exigir a ambos la apertura de un proceso de negociación que solucione sus problemas sobre el asfalto.

La DGT de Madrid fue escenario de la primera manifestación

La DGT de Madrid fue escenario de la primera manifestaciónX-Sabah

El conflicto está relacionado con la convalidación directa de sus carnets de conducir de automóvil, algo que en la actualidad les obliga a volver a examinarse en España, lo que para muchos resulta muy complicado porque en algunos casos directamente no saben leer, mientras que en otros no conocen la caligrafía occidental.

No saben las letras

Así las cosas, hasta 2004 existía un acuerdo de convalidación directa, pero la regularización entonces de miles de marroquíes no se acompañó de una actualización del acuerdo de convalidación del carnet de conducir, lo que provocó que miles de ellos con ciudadanía española no lo tengan en vigor al no haberse presentado al examen.

Los marroquíes afectados se ofrecen a hacer el examen práctico

Los marroquíes afectados se ofrecen a hacer el examen práctico

En este caso conducen con el carnet de conducir de Marruecos, algo que no está permitido en España, lo que se traduce en que cada vez que los paran en carretera los agentes los sancionan con 500 euros, pues a todos los efectos circularían sin carnet de conducir, lo que además es un problema muy importante de cara a los seguros.

Los necesitan para trabajar

Los colectivos marroquíes explican que en muchos casos necesitan los carnets para trabajar, pues suelen ganarse la vida en el campo, por lo que exigen una solución inmediata que podría pasar por un examen práctico, eliminando el teórico, que es el que más problemas les genera.

Un problema el de la asimilación lingüística que debería valorarse en su contexto, pues es posible que ponerse al volante sin entender las señales de tráfico pude considerarse como un factor de riesgo asociado a la conducción.

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