
Los controles de carretera son cada vez más numerosos
Seguridad vial
¿A qué hora del día o de la noche es más probable que te paren en un control?
Se trata de una cuestión de lógica y de probabilidades, pero conviene saber que año tras año aumenta el número de controles que realiza la Guardia Civil
Con más de siete millones de controles de alcoholemia al año y unos 300.000 de drogas, a quien no le hayan parado alguna vez en alguno puede considerarse como un verdadero afortunado y debe tener claro que le van a parar más pronto que tarde.
En España la DGT denuncia cada día más de 500 positivos por alcoholemia, lo que significa que a pesar de su peligrosidad aún hay conductores que siguen conduciendo con alcohol en sangre, una verdadera irresponsabilidad en la que lo menos importante es la multa y que pone en valor los controles.
Los controles funcionan
Además de los controles de alcoholemia, la Guardia Civil y la Policía Municipal aprovecha para verificar la documentación de los vehículos y el conductor, el estado mecánico o incluso el uso del cinturón y el móvil al volante, con lo cual puede hablarse de una gran variedad de controles.
Los controles de alcoholemia son los más conocidos
No existe un patrón único para poder hablar de cuándo y cómo se desarrollan los controles en las calles y carreteras, aunque sí que hay determinadas circunstancias que suelen repetirse.
Los más habituales
Por ejemplo los controles de alcoholemia son mucho más normales después de comer, es decir entre las 16:00 y las 18:00 horas y de madrugada, entre las 04:00 y las 09:00 de la mañana, lógicamente se trata de las horas con mayor incidencia de conductores borrachos. En este caso hablamos siempre de sábados y domingos.
Los controles de velocidad en cambio son más habituales los viernes y los domingos en las horas punta de salidas y entradas a las grandes ciudades, así como los controles de uso de móvil y cinturón.
Los controles de velocidad son más habituales los viernes y fines de semana
Por supuesto todos estos controles se multiplican hasta el infinito los fines de semana, puentes, vacaciones y operaciones salida o entrada y suelen desarrollarse también en carreteras poco concurridas para pillar a los que los usan para 'escaparse' o en puntos negros para obligar a los vehículos a moderar la velocidad.
Al fin y al cabo es una cuestión de lógica, en función del tipo de control tienden a estar atentos de las zonas y horarios más conflictivos.
Los cambios de turno
Por último, el viejo truco de las horas de los cambios de turno que dice que a las horas a las que terminan unos agentes y comienzan otros se quitan los controles ya no se cumple, pues los agentes cruzan turnos para que no ocurra e incluso hacen controles en horas extra.