Mercedes se pone las pilas y lanza uno de los eléctricos con mayor autonomía del mercado: 800 kilómetros

La firma de las estrella lleva meses advirtiendo de que el nuevo Mercedes CLA es un modelo clave en el futuro de la nueva Mercedes. Se trata de un coupé cuatro puertas de línea atractiva, moderna y lógicamente continuista, tal y como es tradición en la marca.

Se trata de un vehículo que crece hasta los 4,70 metros de largo, una cota que antes quedaba reservada para los Clase C. Una de sus principales virtudes es una carrocería esculpida con delicadeza para lograr uno de los mejores coeficientes de resistencia aerodinámica del mercado, con un Cx de 0,21.

Consumos de risa

En el interior llama la atenció la mejora general de calidad registrada frente la anterior Clase A, modelo del que derivó el primer CLA. En el nuevo los materiales son más firmes y los encuentros mucho más precisos, todo ello sin recurrir al black piano, ese material negro que tanto se ensucia y tan poco gusta a los conductores.

Destaca la triple pantalla, la primera de 14 pulgadas sirve para el cuadro de instrumentos, la segunda para la multimedia y la tercera opcional es para el copiloto, todas unidas por un marco común.

Mucha tecnología

En materia de espacio la habitabilidad es muy parecida a la del modelo al que sustituye, con espacio suficiente para cuatro ocupantes pero sin grandes alardes, especialmente en la cota de altura.

El conjunto se completa con dos maleteros, uno trasero de 405 litros y otro delantero de 101, más que suficiente para las necesidades del coche.

En el apartado mecánico el vehículo llega a España en dos versiones 100 % eléctricas 250+ y 350 4Matic, la segunda con dos motores eléctricos y tracción integral, la potencia es respectivamente de 272 y 354 caballos, pero lo que realmente sorprende es la autonomía de ambas versiones, con 792 y 768 kilómetros.

Esta cifra posiciona al CLA como uno de los coches con mayor autonomía del mercado gracias entre otras cosas a su batería de gran capacidad y a un consumo extremadamente bajo. De hecho durante el recorrido de pruebas el consumo estuvo siempre por debajo de los 15 kWh a los 100 kilómetros.

Consumos de risa

Sobre el asfalto destaca por su calidad de rodadura, un coche silencioso y extremadamente fino a los tactos de conducción, con una dirección rápida y muy precisa y un silencio de marcha que sorprende incluso para tratarse de un eléctrico, eso que la sonoridad interior penaliza a causa de las ventanillas sin marco, pero es que no se escucha absolutamente nada.

En materia de equipamiento el modelo muy completo, con opcionales tan atractivos como el kit de personalización AMG. Los precios de partida de las dos versiones son 54.700 euros y 59.300, sin duda merece la pena la versión superior.