Todos los tipos de piel pueden presentar deshidratación
Este es el ingrediente clave que debes buscar en tu crema hidratante
Todos los tipos de piel pueden presentar deshidratación
¿Cuándo se empiezan a intuir los primeros síntomas del envejecimiento? ¿Cómo mantener una piel perfecta? Para la Dra. Marta Garay, «una piel sana y bonita es aquella que mantiene un nivel de hidratación correcto». La colaboradora del Skin Health Lab de Neutrogena explica que «la cantidad de agua ideal de la epidermis, la capa más externa, debe ser de un 10-20% del total de agua corporal». El problema viene cuando se produce la pérdida de agua de la barrera lipídica, es decir, la capa que actúa como protectora frente a agentes externos. Esto se va a ver reflejado en la piel mediante la aparición de arrugas prematuras y sequedad generalizada.
La doctora comenta que es frecuente caer en el error de pensar que las pieles mixtas o grasas no se deshidratan. Pues bien, nada más lejos de la realidad, todos los tipos de piel pueden presentar deshidratación, incluso las grasas, «cuando la barrera lipídica se ve alterada, las consecuencias son similares en pieles tanto grasas, mixtas o secas».
Cuáles son las señales
La doctora explica que las señales que delatan una piel deshidratada son cuando la piel «se observa apagada, tirante, envejecida y de aspecto rugoso pudiendo llegar a presentar síntomas como el picor y escozor, y, en casos más graves, a la aparición de patologías dermatológicas como la inflamación o xerosis».
Un factor también determinante y que no debemos olvidar es el grado de humedad de nuestra piel, determinado, en parte, por el clima en el que vivimos (si es seco, presentaremos una piel con más predisposición a la pérdida de agua, mientras que, en un clima húmedo, la piel se verá más beneficiada en cuanto a hidratación). Sin olvidar los factores endógenos (hereditarios, edad avanzada o consumo de determinados medicamentos).
Para lucir una piel hidratada durante todo el día, la doctora recomienda tratamientos con ácido hialurónico (como la gama Hydro Boost de Neutrogena): «El ácido hialurónico es el principio activo más hidratante de todos gracias a su gran capacidad para captar agua y actuar como un relleno dérmico lo cual nos va a ayudar a mantener un aspecto sano y joven. Es apto (y necesario) para todo el mundo y para cualquier tipo de piel» comenta la Dra. Marta Garay.
Rutina para pieles normales
«Una buena rutina de limpieza debe de empezar siempre por la retirada del maquillaje con agua micelar y posteriormente finalizar con un buen producto de limpieza, que en las pieles normales puede ser un limpiador gel que nos ayude a retirar las impurezas y exceso de grasa. Posteriormente no debemos de olvidar usar una crema hidratante, y la hidratante facial con protección solar es la mejor opción para el día a día.»
Rutina para pieles secas y deshidratadas
Las pieles secas que necesitan retener la humedad y formar un escudo protector frente a las agresiones externas. «Tras haber retirado el maquillaje con agua micelar procedemos a limpiar la piel con una leche limpiadora que nos ayude a mantenerla bien hidratada. La hidratante en formato gel aporta un extra de hidratación a las pieles secas, que siempre pueden añadir a su rutina de noche la mascarilla hidratante de dos a tres veces por semana».
Rutina para pieles con deshidratación severa
«Si partimos de una deshidratación severa debemos de aportar a la piel un extra de hidratación mediante el Sérum Supercharged, el cual hidrata la piel intensamente atenuando las pequeñas arrugas y aportando luz al rostro. No debemos de olvidarnos del contorno de los ojos ya que en una piel con deshidratación severa los signos de la edad son más evidentes en esta zona».
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