El Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo

El Defensor del Pueblo, Ángel GabilondoEuropa Press

Ángel Gabilondo fue portavoz del PSOE en la Asamblea de Madrid

El PP acusa al Defensor del Pueblo de actuar como «un actor del PSOE» y poner en riesgo a los menores con su recurso contra la ley trans de Ayuso

El Partido Popular de Madrid considera que el Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, está actuando por «estrategia política del PSOE» con su recurso contra la reforma de la ley trans de la Comunidad de Madrid que impulsó el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso el año pasado. El Tribunal Constitucional ha admitido a trámite esta semana el recurso de Gabilondo, y la diputada del grupo parlamentario popular en la Asamblea de Madrid, Mónica Lavín, la que fuera encargada de orquestar y defender esa reforma, considera que «el PSOE ha colonizando todas las instituciones y Gabilondo actúa como un actor político más contra la Comunidad de Madrid poniendo en riesgo la salud de los menores».
Cabe recordar que el actual defensor del pueblo fue el portavoz del grupo parlamentario socialista en la Asamblea de Madrid de 2015 a 2021. Ángel Gabilondo ya sonaba como próximo Defensor del Pueblo cuando Ayuso decidió convocar elecciones anticipadas en mayo de 2021. Durante esa campaña electoral, Ayuso reiteró que si de ella dependía, Gabilondo no iba a ser «jamás» Defensor del Pueblo puesto que, a su juicio, su forma de hacer oposición utilizando la pandemia le habían inhabilitado para ello.
Sin embargo, finalmente PP y PSOE llegaron a un acuerdo para que Gabilondo sustituyera a Francisco Fernández Marugán como Defensor del Pueblo pocos meses después del desplome electoral del socialista en los comicios autonómicos de aquel 4 de mayo de 2021, tras los que presentó su dimisión como diputado autonómico.
Un acuerdo del que, a tenor de las últimas manifestaciones de los populares tras al admisión a trámite por parte del Tribunal Constitucional del recurso contra la reforma de la ley trans madrileña, podrían arrepentirse. «Su sectarismo e irresponsabilidad al presentar este recurso son muy preocupantes, impropios de una alta institución del Estado», opina Lavín.
La diputada se pregunta «¿Cómo puede el Defensor del Pueblo recurrir una reforma que persigue la protección de la infancia garantizando su derecho a la salud integral física y mental? ¿Cómo puede el Defensor del Pueblo negar la importancia del acompañamiento psicológico a los menores antes de un tratamiento irreversible?».
Y es que el recurso de Gabilondo va en concreto contra el artículo 14 del nuevo articulado que establece que «para iniciar el tratamiento farmacológico será requisito necesario que previamente reciban apoyo de los profesionales de salud mental infanto-juvenil, mantenido durante todo el proceso y en el caso de que existiera comorbilidad será imprescindible un informe favorable del profesional que esté tratando al menor en dichas patologías».
Pero, para el Defensor del Pueblo, este precepto lo que hace es «estigmatizar» a los niños. «Presumir que es bueno para todos los menores recibir el apoyo de profesionales de la salud-mental, así como exigir un informe favorable del médico que trate al menor en caso de padecer alguna enfermedad, lejos de protegerles les estigmatiza, y restringe el ejercicio del derecho a preservar su intimidad, su espacio de seguridad y libertad frente a terceros, y a desarrollarse de la manera deseada», sostiene.
Mónica Lavín tiene claro que este recurso supone la renuncia de Gabilondo de ser el Defensor del Pueblo «para serlo de una estrategia política» y recuerda que «toda la comunidad científica de España y de Europa avala esta reforma garantista y prudente con la infancia».
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